Huércanos despide cariñosamente a Pablo Berasaluze

Rioja2

0

Pablito Berasaluze es muy querido en La Rioja, sobre todo en localidades como Leiva o Huércanos. En esta última localidad se le puede ver últimamente, como el día anterior del partido para pregonar las fiestas patronales. El miércoles recibió el cariño de los de Huércanos y alrededores, aunque a cambio tuvo que esforzarse nada menos que contra un Aimar Olaizola en forma: el campeonísimo navarro ganó 16 tantos, por lo que mucho mérito tuvieron Berasaluze II y Untoria para llegar vivos a la recta final del partido.

El ratón de Berriz se está despidiendo este verano de la pelota profesional, y aunque ya no está en su mejor momento, en el frontón pochanquero ofreció bastantes detalles de su genio rematador. Sobre todo lo que más echaremos de menos de su forma de jugar es la habilidad del vizcaíno para enredar adelante a sus rivales, ese juego que tanto nos gusta a este lado del Ebro. En los 53 minutos que duró el encuentro Berasaluze ganó 13 remates y un saque.

Si adelante Olaizola II enseñaba sus galones a Pablo, atrás fue Untoria el zaguero dominante, sacudiendo más y mejor que Larumbe, y consiguiendo 3 tantos de pelotazo. En el debe, dos errores cada uno, uno de los de Alvarito al no devolver un saque restable.

El partido transcurrió con continuos abrazos en el marcador, hasta que tras el empate a 17 Olaizola enfiló la senda de la victoria. Los primeros tantos fueron azules (3-1 y 7 a 2), pero tras remontar Berasaluze y Untoria hasta el empate a 7 igualada en todos los números hasta el 17 (salvo en el 13). Tras los tantos movidos Pablito se mostraba más asfixiado, pero con un conveniente descanso (incluso saliendo fuera del recinto) volvía a la carga en el siguiente sin problemas. De esta manera, el público disfrutaba con bonitos puntos ganados alternativamente por los dos delanteros.

Sostengo que para ser un matador de la pelota hay que tener un puntito de mala hostia. Algo tiene el bueno de Pablito, que en dos ocasiones se enzarzó en una estéril discusión con Carlos, el juez principal, pidiendo falta de sus rivales. Imperdonable, en un pelotari de su veteranía, que en la primera ocasión se desentendiera del juego, permitiendo que Olaizola ganara el punto sin presentar oposición. Un error de novato.

Como incidencia resaltamos que Valeriano Ruiz, el incombustible factotum de La Voz del Najerilla, recibió un impacto de la pelota en el rostro mientras tomaba fotos desde el frontis, cuando Pablito intentaba recoger un gancho a la punta de Aimar.

Etiquetas
stats