El ciclismo entre viñas que atrae por igual a hipsters y nostálgicos

El ciclismo entre viñas que atrae por igual a hipsters y nostálgicos

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No es una carrera ciclista más. Eroica Hispania es la prueba de ciclismo clásico por excelencia, con la peculiaridad de que se corre entre viñas, campos de cereales y olivos. Del 2 al 4 de junio, como refleja El Confidencial, celebrará su tercera edición con salida y meta en Cenicero y la única norma para participar es montar en bicicletas anteriores a 1987.

El artículo se hace eco del placer que supone pedalear por “un puzle ribereño de pintoresca belleza, salpicado de pueblos de piedra roja y sus bodegas. Suaves colinas, encerronas en caminos sin asfaltar y al norte, el zócalo de roca caliza que corona la sierra de Cantabria y que atrapa las nubes que vienen del más allá (...) En esta Tierra Media tolkiana del comer y el beber que es La Rioja, la bicicleta encuentra terreno abonado”.

BICIS CLÁSICAS

Para participar, hay que montar una bicicleta anterior a 1987 y este año, Marino Lejarreta será el padrino de esta prueba, que busca devolver al ciclismo la credibilidad que tenía años atrás y dar una visión de este deporte más sana, con los productos naturales de la tierra, como el vino, como protagonistas.

La Eroica comenzó a celebrarse en la Toscana en 1997 y poco a poco fue creciendo en importancia y en participación. En los caminos de tierra por los que transita, el participante se puede encontrar al hipster más hipster de Malasaña o al nostálgico más nostálgico vestido con el maillot del Kas o del Reynolds montando una Orbea Moncayo o una BH Vento.

De la mano de Carlos Coloma, la Eroica llegó a La Rioja. Sus organizadores se vieron atraídos por sus paisajes y por la cercanía con el Camino de Santiago y el Monasterio de San Millán de la Cogolla, y este año celebra ya su tercera edición.

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