La atención personalizada, punto fuerte del comercio de Logroño

Además de generar empleo, el comercio minorista es un elemento dinamizador de las calles. De hecho, “las calles con poco comercio están muertas”. Así de contundente muestra Natalia Medrano Sáez, autora de una tesis doctoral desarrollada en el marco de la Cátedra Extraordinaria de Comercio de la Universidad de La Rioja.

Medrano ha analizado el comportamiento del consumidor logroñés en el sector de comercio minorista y, tras realizar algo más de 200 entrevistas, la conclusión es clara. “Las personas que prefieren comprar en el comercio logroñés lo hacen motivados por la atención personalizada y la comodidad”. Curiosamente, apunta, “la atención personalizada está en primer lugar por lo que se puede deducir que este es uno de los puntos fuertes del sector”.

Eso sí, puntualiza, “es importante que esta atención personalizada sea profesional porque no todo el mundo sirve para trabajar en el comercio minorista y, de hecho, se nota claramente quién es un profesional y quién está de paso”. Por esta razón, “es clave la formación, un buen profesional debe estar formado, y conocer, entre otras, las técnicas de venta”.

Es importante conocer cuáles son los puntos fuertes del comercio minorista para potenciarlos pero a la vez conocer también las debilidades para subsanarlas y conseguir así nuevos clientes. Y es que, según el estudio de esta experta, “las personas más propensas para comprar en el comercio minorista son las personas mayores de 65 años que buscan una atención personalizada, sin dar tanta importancia a la oferta comercial o al precio”.

En este sentido, apunta, tenemos un amplio abanico de clientes potenciales a los que debemos atraer. En este sentido, recomienda a los comerciantes pararse a pensar “en qué mundo estamos y qué podemos hacer para atraer a este público a mi negocio”. La solución, dice, está en la comunicación. “Podemos comunicar a través de la web, de las redes sociales, influencers... ver dónde se mueve la comunicación del público que queremos captar e ir a por ello”.

Pero además, un factor clave en la comunicación hoy en día son los escaparates. “Los comerciantes tienen que utilizar sus escaparates para comunicar ye esto es precisamente lo que se persigue con la iniciativa Lovisual que arranca estos días, un claro ejemplo de innovación en diseño a la que se han sumado muchos comerciantes que han participado en nuestros cursos de formación”.

Convencida de que la salud del comercio logroñés es buena, Medrano ve en la “omnicanalidad”, el futuro de este sector. Se trata, explica, de la convivencia de los distintos canales, eso sí, teniendo siempre en el centro a los clientes y adaptándolo a las circunstancias de cada uno. Eso sí, advierte, “si no estás en internet, estás muerto”. Y, de hecho, considera “imprescindible tener esta ventana abierta. Luego ya le daré una vuelta para ver cómo la utilizo en función de mis posiblidades, clientes y necesidades”.

La Cátedra Extraordinaria de Comercio nación en 2010 a inciativa de la Cámara de Comercio e Industria de la Rioja y del Ayuntamiento de Logroño para apoyar e impulsar el comercio minorista de la ciudd mediante la formación y la investigación y cuenta con el patrocinio del Ayuntamiento de Logroño.