Nacho Guerreros se convirtió en actor gracias al Gordo de Calahorra

El 22 de diciembre de 2002 se repartía el primer premio en euros de la historia y la suerte quiso que una buena parte del Gordo fuera a parar a Calahorra. 130 millones de euros para una localidad de 23.000 habitantes. Buena parte del municipio estaba ese día de celebración, entre ellos, los padres del actor Nacho Guerreros.

Así lo ha relatado él mismo a El País. Al parecer, aquella mañana recibió un mensaje de su prima en el buzón de voz contándole la buena noticia. Él trabajaba de noche en un bar de copas y lo de ser actor era todavía un sueño. Pasó toda la mañana intentando localizar a sus padres, que entonces no tenían móvil y pasaron horas en la calle celebrando el premio de la lotería.

Han pasado 15 años y el día se sigue recordando en Calahorra, y también en la familia del actor de 'La que se avecina', ya que el dinero marcó un antes y un después para ellos. Gracias al premio, Nacho Guerreros pudo dar el empujón definitivo a su carrera profesional. Primero montó una tienda de diseño y decoración en Madrid y, durante cinco años, compaginó el negocio con sus primeros pasos en el teatro profesional. Gracias al dinero que le prestó su padre, compró los derechos de reproducción de Bent, una obra de Martin Sherman. Su magnífica puesta en escena es la que le abrió las puertas para su primer papel importante en la televisión, en 'Aquí no hay quien viva'.

Aquel número, el 8.103, cambió la vida a muchos calagurritanos y Guerreros fue uno de ellos. La cofradía de la Santa Vera Cruz repartió millones entre sus cofrades y vecinos y restauró además la iglesia de San Francisco y amplió sus instalaciones. Una de las campanas que se instalaron en el templo tras la reforma, fue bautizada como 'La Lotería' y lleva grabado el número ganador.

La vida cambió en todo el pueblo. Subió el precio de la vivienda, aparecieron un montón de coches nuevos, hubo más viajes, compras, joyas... También cambió la venta de lotería. Desde la cofradía cuentan a El País que antes les costaba muchísimo vender sus participaciones pero que ahora las agotan en 15 días.