Los niños acompañan a la Borriquilla

Los niños acompañan a la Borriquilla

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Aunque ya ha se han celebrado algunas procesiones, el Domingo de Ramos abre oficialmente la Semana Santa. Los niños con sus palmas protagonizan esta procesión, que se convoca en numerosas localidades de La Rioja.

Antes de las 12:00 horas, numerosos niños aguardaban expectantes a las puertas de la Concatedral de La Redonda. Con sus palmas llenas de chucherías, todos querían acompañar a la procesión de la Entrada Triunfal en Jerusalén, organizada por la Hermandad de Cofradías.

La Plaza del Mercado ha acogido la bendición de palmas y ramos y, a continuación, la Borriquita ha salido en procesión acompañada por cientos de niños y por las secciones infantiles de las cofradías.

Acompañando al paso, los toques y marchas típicos de esta época que, con sus sonidos, envuelven a la ciudad dentro del ambiente litúrgico. Así, tras comenzar en la plaza del Mercado, La Borriquilla ha paseado por la calle Portales y ha enfilado su recorrido habitual por Muro del Carmen, Muro de la Mata, Sagasta para, de nuevo, llegar a Portales, hasta la Concatedral.

El conjunto de la imagen se compone de cuatro figuras, la principal de Jesús en la Borriquita, un niño que observa el paso del Señor, una joven que extiende un manto a los pies y una mujer con un niño en brazos que aclama a Jesús con una palma en la mano.

Logroño, cuya Semana Santa estrenó hace dos años su reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico Nacional, acogerá durante toda esta semana un total de 16 procesiones que comenzaron el día 23 de marzo con la del Viernes de Dolor.

Pero no sólo en Logroño se cumple con esta tradición. En Arnedo también la borroquilla ha salido en procesión desde la Iglesia de Santo Tomás para finalizar en la de San Cosme, acompañada de numerosos niños con sus palmas.

También en Calahorra han seguido la tradición de acompañar a la borriquilla por las calles de la localidad y dar así comienzo de forma oficial a la Semana Santa.

En Aldeanueva de Ebro, sin embargo, la borriquilla no estaba para muchas procesiones, como muestra la revista Reserva.

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