Remontada para sumar el primer triunfo

11 de octubre de 2018 09:23h

38 minutos por debajo en el marcador no hicieron mella en un Bodegas Rioja Vega que se estrena en LEB Plata gracias a un espectacular último cuarto en el que anotó 31 puntos (al descanso sumaba 29). De hecho, un triple de Cuevas a falta de 1.46 para la conclusión fue la primera vez que los riojanos se adelantaron en el electrónico. Inesperado triunfo por cómo se sucedía el duelo y porque al arranque del tercer período, el cuadro de Jenaro Díaz perdía 48-32. Sin embargo, el acierto en el lanzamiento exterior (14 de 29), unido a las grandes aportaciones desde el banquillo -el quinteto titular anotó 19 puntos- con buenos minutos de Cuevas, Jordan y Nissen propiciaron la voltereta frente a un Ávila que tuvo más dificultades para meter canastas durante la segunda mitad en parte por culpa de una mejora actitud defensiva del cuadro logroñés.

Todo se decidió en los instantes finales porque previamente el Ávila dominaba la situación merced al tino de Mulero desde fuera y la actuación por dentro de Faye. El Rioja Vega estaba desajustado en labores defensivas y, encima, en ataque no estaba lúcido. La consecuencia fue un 42-29 al descanso favorable a los locales. Intentó reaccionar el bando visitante, pero se encontró con el citado 48-32. Fue a partir de ese momento, con un parcial de 0-7 y su continuidad hasta la conclusión del cuarto cuando los de Jenaro Díaz entendieron que podían meterse en el partido.

Con 54-48 arrancaban unos diez minutos finales en los que el Rioja Vega apostó. Todo o nada. Le salió bien. Abusó del triple, del ritmo acelerado, rápido, vertiginoso. Estuvo acertado y se presentó en condiciones de ganar. Nissen, Noguerol, Jordan, Cuevas y Lafuente. Un quinteto que ofreció más consistencia y seguridad en ambos lados de la pista. Desde el 6,75 el conjunto logroñés se ponía a tiro, 59-56 y 62-59. Ávila metía una marcha más, 67-61, pero Jordan se sacaba de la chistera un triple con dos encima y el adicional con 4 minutos por delante. Nissen empataba a 67 y a 70.

Pero fue Cuevas, con un triple, el que dejaba en silencio el pabellón Carlos Sastre, 72-73. De nuevo, Cuevas se la jugaba desde fuera tras un robo: 74-76. Quedaban 40 segundos. A partir de ese momento, mente fría y acierto desde los libres. García cometía falta en ataque con 19 segundos y un jugoso 75-78. Cuevas metía uno. Era suficiente porque la victoria ya no se escapaba: 75-79. El domingo llegará el Tormes al Palacio.