Todos los puentes riojanos se encuentran en buen estado

El derrumbe el pasado mes de agosto de un puente en la italiana Génova abrió el debate sobre el estado y la seguridad de las infraestructuras viarias, más aún teniendo en cuenta la drástica reducción de la inversión en su mantenimiento tras la crisis económica. Algunos países como Alemania han publicado los datos, pero España los ha mantenido cerrados hasta este momento, alegando “motivos de seguridad”.

El Ministerio de Fomento posee una base de datos, a la que ha tenido acceso El País -Sistema de Gestión de Puentes (SGP)-, en el que se incluyen todos los detalles de las inspecciones, incluidas las medidas tomadas para arreglar las patologías encontradas.

Así, se ha conocido que la Red de Carreteras del Estado tiene 66 puentes con graves problemas de seguridad. Son apenas un 0,29% de las 23.000 que existen -todas ellas han sido inspeccionadas al menos una ocasión en los últimos 5 años-, y en ningún caso presentan peligro de desplome ni riesgo para los usuarios. Por el contrario, solo el 6,5% se encuentran en perfectas condiciones.

Una distribución desequilibrada

Durante esas inspecciones, los expertos utilizan unos índices (extensión, gravedad y evolución) que dan lugar a una clasificación final de 0 a 100. Cuantos menos puntos, mejor estado. Si una estructura supera los 81 puntos se considera que tiene “patologías potencialmente graves que pueden afectar a su comportamiento resistencia”. Aquí entran esos 66 viaductos, que se reparten entre 26 provincias. Y más de la mitad (34) se encuentran en Andalucía, seguida por Galicia (10) y Castilla y León (9). Mientras, hay comunidades autónomas enteras sin ningún caso -entre ellas La Rioja, País Vasco o Navarra-.

Si ampliamos el foco a las provincias, Cádiz y Málaga, con nueve cada una, lideran la clasificación.