Desmantelada una banda que obligaba a ejercer la prostitución a varias mujeres en el centro de Logroño

Una organización criminal ha sido desmantelada por obligar a ejercer la prostitución en un piso del centro Logroño a mujeres extranjeras que habían traído de España diciéndoles que les iban a ofrecer trabajo, según avanza el periódico Noticias de La Rioja.

La Policía Nacional ha detenido una mujer de 43 años con antecedentes penales, de nacionalidad española y origen colombiano y que es presuntamente la presunta cabecilla de esta trama. Está acusada de delitos de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, prostitución y tráfico ilegal e inmigración clandestina con fines sexuales.

Noticias de La Rioja explica que cuando se produjo la detención, durante la semana pasada, había varias mujeres ejerciendo la prostitución en la vivienda en la que estaban recluidas y dos fueron también arrestadas por estar en situación irregular.

Una de las víctimas denunció su situación cuando viajó de Colombia a España engañada por la líder de la organización. Esta le ofreció un puesto en un restaurante español, se trasladó hasta su país de origen para facilitarle los billetes de avión de ida y vuelta y una reserva de hotel en Madrid, y asesorarla para pasar la frontera española. Al llegar a España, le trasladaron a un piso de la calle Villamediana, donde le obligaron a ejercer la prostitución para saldar la deuda contraída, junto con otras mujeres, todas ellas de origen extranjero.

Como ha podido saber Noticias de La Rioja, las mujeres dormían hacinadas en una habitación, mientras que el resto de dependencias se utilizaban para ejercer la prostitución, salvo la que ocupaba la líder de la trama.

La víctima, por cada servicio prestado, tenía que destinar la mitad del dinero a la detenida y la otra mitad a pagar las gestiones que ésta realizó para que pudiera llegar a España. Una vez que consiguió abandonar el piso recibió numerosas amenazas por parte de la detenida relacionadas con hacer daño a su familia o con acudir a la Policía para que le deportaran.