Tres derrotas en tres partidos

Tiempo para la reflexión. O no. Este Clavijo desde que se denomina Reina Yogur no conoce la victoria. Tres jornadas, tres derrotas. ¿Saltan las alarmas? Igual no, pero es un aviso serio sobre el nivel que está dando en este nuevo curso el conjunto logroñés. En esta ocasión, se encadena la segunda derrota en el Palacio ante un Innova Chef por 68-73 que mantuvo la calma en el momento decisivo para llevarse un partido equilibrado en el que los riojanos llegaron a perder 26-37, se recompusieron con un parcial de 14-0 para irse al descanso por encima, 40-37. Tras el paso por los vestuarios, equilibrio, alternancia en el marcador, poca anotación y un último cuarto (12-19) en el que los de Zamora remontaron el 56-54 y sí tuvieron la continuidad de la que no gozaron los chicos de Jenaro Díaz.

Disfrutar de más tiros de campo (66 por 50), y de meter más (25 por 23), no es sinónimo de ganar. Que se lo digan a un Clavijo que al descanso cedían en la cantidad de rebotes (11 por 16), cuestión que igualó en la conclusión (33), y que aprovechó (algo tendría que ver la defensa local) las pérdidas de balón (17) de Zamora para estar con vida durante todo el encuentro. En este sentido, se intuye que a este equipo le cuesta anotar -no es ninguna novedad desde que está el técnico asturiano al frente del banquillo-. De poco sirvió el liderazgo inicial de Lopes (7 de los primeros 10 puntos) para un 10-6 esperanzador. Tras las tablas, 10-10, los riojanos iban por delante, pero a trancas y barrancas, con mucho sacrificio y esfuerzo: 12-10, 14-13, 16-15.

Zamora se ponía por delante y cerraba el cuarto 18-19, pero seguía con ventajas mínimas, 20-23, que se estabilizaron en los 6 puntos gracias a Molins, 21-27 y 23-29. Entonces entraron en acción Libroia, con un triple, y Carroll, con otro triple y dos tiros libres, para agrandar las diferencias hasta un preocupante 26-37 en el ecuador del segundo acto. Por fortuna, el Clavijo se hizo fuerte atrás, no concedió ningún punto hasta el descanso, y comenzó a estirarse y coger confianza en ataque para enganchar un demoledor parcial de 14-0, que dejaba todo en el aire con el 40-37.

Pero el supuesto mazazo moral no afectó a Innova Chef que recuperó el mando de las operaciones, 40-41. Dio igual que Ott (43-41) y De Pablo (49-46) voltearan el electrónico. Costa tiraba de los suyos para empatar a 51 y aunque el Clavijo se armó de valor para acceder a los últimos 10 minutos con una mínima renta, 56-54, se fue diluyendo en el momento de la verdad. No estuvo a la altura de las circunstancias. Y más en casa, con su público. Molins y Costa, con dos triples, ponían el 56-60. Con 6 minutos por delante, el 59-65 era real. Poco varió en 60 segundos, 61-67. Mucho que hacer en medio cuarto. Lafuente, con un triple, daba vida, 64-67 (última vez que se pusieron a tiro).

Pero Zamora cerró su aro, tampoco es que los anfitriones estuvieran acertados, y pese a que a los visitantes también les costaba sumar puntos lo hicieron con la suficiencia de entrar a la recta final con más de 4 puntos, 64-69 y 66-71. La única excepción fue a falta de 9 segundos cuando Lobo dejaba el 68-71. Costa metió dos tiros libres tras la quinta de Lafuente y daba la puntilla a un Reina Yogur Clavijo que debe hacérselo mirar. Tres jornadas, tres derrotas.

Foto: CB Clavijo