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El Alto Cidacos une fuerzas para reclamar la paralización del megaparque eólico de Los Cruzados

El Alto Cidacos une fuerzas para reclamar la paralización del megaparque eólico de Los Cruzados

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Vecinos, vecinas, amigos y amigas del Alto Valle del Cidacos se han concentrado este domingo para reclamar la paralización total del megaparque eólico Los Cruzados. La Plataforma por el Desarrollo Sostenible del Alto Cidacos, convocante del acto reivindicativo, surge de la preocupación común generada por el proyecto de construcción de un megaparque eólico en las cumbres del Hayedo de Poyales, ubicado entre La Rioja y Soria.

Como detallan, en él se contempla la instalación de una subestación eléctrica situada a tan solo 200 metros del Hayedo de Poyales y una red de evacuación de alto voltaje (220 kV), que dividirá Enciso y La Rioja de sur a norte: “Si este plan llegara a materializarse, sería el segundo gran atropello ambiental que sufriría el municipio de Enciso tras la construcción de la presa”.

En el acto de este domingo se ha buscado “establecer un paralelismo entre la vulnerabilidad que sentimos las personas tumbadas en un suelo y la vulnerabilidad del medio ambiente a causa de la intervención humana. Ocupar el espacio de forma simbólica con el único territorio del que realmente somos dueñas o dueños, nuestros cuerpos. Tirados en el suelo somos frágiles, la naturaleza ante el progreso incontrolado, también. Generar fuerza desde la fragilidad; fuerza que provoca el impacto visual al poner imagen real a la longitud de un mega eólico”.

“Imaginad esta misma columna erguida hacia el cielo; imaginad la pared de la presa dos veces y medio su tamaño. Si no lo paramos, pasará de nuestra imaginación a la dura realidad”, han recalcado.

Los participantes y otros vecinos, visitantes, oriundos y amantes de esta zona han suscrito un manifiesto en el que se apunta lo siguiente:

- El brutal impacto que ocasiona el proyecto sobre el territorio, en el que se prevé la instalación de 23 aerogeneradores de 200 metros de altura, una subestación de 200 metros cuadrados y una red de torres de 50 metros para evacuar la electricidad y que atravesaría, de sur a norte, toda la región.

- La falta de transparencia, información y participación de la población en la elaboración de un proyecto que supone una radical afección al territorio y que, de llevarse a cabo, cambiaría la forma de vivir, de comprender, de mirar y apreciar el lugar con el que mantenemos un estrecho vínculo.

- El gigantismo de todo el proyecto, lo que convierte a toda la comarca en una inmensa fábrica de producción eléctrica y donde sus bosques, ríos, casas, terrazas, caminos, tierras, aves, paisajes y personas son considerados como un estorbo y no como recursos a preservar y herramientas para activar la vida de la zona.

- La desproporción entre los objetivos productivos del proyecto, que prevé más de 69 MW, y las necesidades de consumo energético de la comarca y del conjunto de La Rioja, donde la producción de energías renovables ha alcanzado más del 70% de los objetivos marcados para 2030.

-La completa falta de planificación territorial en una obra que afecta a más de 10 municipios y que tantas afecciones ocasiona, donde son las empresas promotoras las que deciden cómo vamos a vivir en el presente y en el futuro y son ellas las que decidirán sobre nuestras vidas y de las de las próximas generaciones durante siglos.

-La contradicción entre los proyectos públicos en marcha, tales como el Geoparque o la Reserva de la Biosfera y las Centrales Eólicas como la de Los Cruzados, cuyas infraestructuras son incompatibles con los objetivos que dichos proyectos proponen.

- La falacia de la dicotomía entre Sostenibilidad y Economía, o Empleo y Calidad Ambiental; más aún cuando sabemos con certeza de la escasa o nula capacidad de estas infraestructuras para generar empleo decente y, menos aún, empleo en la zona.

Al tiempo, se han comprometido:

- A trabajar sin descanso para informar a toda la población sobre las características y los efectos del proyecto de la Central Eólica Los Cruzados y a exigir a las autoridades locales y regionales transparencia, participación, una posición firme contra el proyecto y visión de futuro.

- A utilizar todas las herramientas legales existentes para impedir que el proyecto se lleve a cabo.

- A cooperar con las demás plataformas de La Rioja y del conjunto del Estado Español para frenar la puesta en marcha de las más de 100 Centrales Eólicas que pretenden construirse.

Y, por último, piden:

- La paralización del proyecto por las elevadas afecciones que conlleva, por la dilapidación de los recursos que genera y por el maltrato a una tierra que durante siglos ha generado cultura, vida y desarrollo.

- La planificación racional, justa y global de todas las infraestructuras energéticas y de toda índole de la región, donde ayuntamientos, comarcas y gobiernos regionales y estatal trabajen por el interés público y preserven el valor de los bienes que nuestra región atesora.

- La búsqueda de soluciones técnicas para la producción energética basadas en la autosuficiencia, la vinculación de los recursos al lugar en el que estos residen, la minoración de los impactos y la consideración del territorio como recurso en sí mismo y no como basurero de todo lo que no cabe en la ciudad.

- La revisión de los planes de uso de las infraestructuras eólicas en producción y la reutilización de las mismas aplicando en ellas las soluciones tecnológicas de las que se dispone.

- La consideración de las personas, de sus organizaciones, de su cultura y de su compromiso con el lugar en el centro de toda acción pública, tanto a nivel local, como regional y estatal.

- La consideración del territorio y de sus recursos como la más valiosa palanca para activar el desarrollo y el más preciado de los bienes con los que contamos.

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