Triste despedida del fútbol profesional

Triste despedida del fútbol profesional

Rioja2

0

Se esfumó el fútbol profesional. Toca esperar, ojalá que no otros veinte años. Pero la singladura de la UD Logroñés por la Liga SmartBank ha sido un hola y adiós. Probablemente lo esperado en septiembre a la vista de la plantilla que manejaba Sergio Rodríguez. Es decir, por ese lado, no debía pillar por sorpresa este descenso. El problema ha podido estar en que el equipo ha competido -quizá no en todos los partidos deseados- y ha mostrado capacidad para haber mantenido la categoría, sin embargo los errores defensivos, muchos de ellos groseros, y la escasa capacidad ofensiva han precipitado los acontecimientos. Máxime cuando en la segunda vuelta, los riojanos han sido el peor equipo en puntuación (17 puntos). Otro aspecto que más daño haya hecho al aficionado -que sí ha estado a la altura pese a no poder entrar al campo y tuvo un recibimiento de gala en los aledaños de Las Gaunas- es la falta de ambición e intensidad en determinados momentos, esa intención de alargar los duelos y confiar en aprovechar las escasas oportunidades que se tienen.

El ejemplo se pudo apreciar ante Las Palmas en la triste despedida. Todo por confiar la salvación a vencer a Fuenlabrada, se cumplió, y al bloque canario, no fue posible. No habría sido suficiente porque Lugo y Alcorcón, también el Sabadell que supera en la tabla a los logroñeses, hicieron lo que se exigía, sumar 3 puntos. Es lo malo de depender de terceros y ahí sí que pudo variar los tiempos el conjunto riojano. En el último enfrentamiento del curso, no se logró la victoria. Ni eso. Enfrente un rival que no se jugaba nada y que sólo se vio incomodado en el tramo final cuando iba ganando y la UD Logroñés, desesperada, se fue al ataque con corazón. Quizá Nano Mesa de haber acertado a los veinte minutos podría haber animado un desenlace algo más esperanzador.

No se desciende por no haber vencido al cuadro de Pepe Mel. Ni mucho menos. La regularidad, mejor dicho, la irregularidad de los blanquirrojos -esos 6 triunfos seguidos que dejaron un colchón que no se pudo mantener- condena a una UD Logroñés en la que muchos futbolistas sintieron bajar a la Primera RFEF como algo propio. Porque, por lo general, la actitud de los jugadores no se cuestiona, quedan en entredicho otros aspectos. Intensidad, ambición..

Sergio Rodríguez para el transcendental duelo apostó por su once más reconocible de las últimas jornadas con la excepción del lesionado Iago López y la presencia de Clemente, tras varias semanas ausente -a ver cómo está de ritmo- por Bobadilla (presente pese a su problema en el pie). Una alineación con la que contrarrestar a Las Palmas, un rival con los deberes hechos y que llegaba a Las Gaunas con bastante gente de la cantera de la partida.

Más allá de un tímido acercamiento inicial de los canarios, Medina intimidaba por su perfil con un tiro que se marchó a córner y desde la esquina lo intentaría Clemente con un remate de cabeza alto. El control era del equipo más necesitado, pero el peligro pasaba por las rápidas transiciones de los pupilos de Pepe Mel. El ejemplo más claro fue la contra que finalizó Edu Espiau con un tiro potente. La UD Logroñés, avisada sobre qué debía tener en cuenta, parecía manejarse bien: no se mostraba nerviosa ni ansiosa e iba madurando la contienda.

Tanto que Álex Pérez dibujó un pase de lujo a la espalda de los centrales amarillos. Por ahí irrumpió Nano Mesa. Controló, puso el cuerpo y chutó a romper con todo a favor. Domínguez aguantó, no se ladeó y el tiro impactó en el brazo derecho del cancerbero -lo extendió- para asombro de todos en un fallo garrafal del jugador cedido por el Cádiz. Las Palmas, sin exponer demasiado, parecía administrar con más criterio la pelota al menos para no sufrir. Asimismo, las imprecisiones y la falta de continuidad se instalaban en el campo municipal. Aspectos que no ayudaban para que los blanquirrojos empujaran y acumularan ocasiones.

Superada la media hora, el Alcorcón se adelantaba por mediación de Fraile, un marcador contrario a los intereses riojanos, que pese a ello no condicionaba el devenir del choque de los logroñeses, a los cuales les empezaba a costar acercarse al área canaria. La verdad es que no estaba sucediendo prácticamente nada. Iñaki le ponía algo de pimienta antes del descanso con una falta que repelía Domínguez tras un bote traicionero. Paulino, con un buen centro, quiso darle continuidad, pero el remate de Nano Mesa se iba fuera. Por si fuera poco, el Lugo (Manu Barreiro) marcaba en Vallecas, lo cual podía generar muchas dudas tras el paso por vestuarios. Faltaban 45 minutos y los riojanos debían ganar además de confiar en que Espanyol y Rayo Vallecano no continuaran perdiendo sus respectivos encuentros.

Roni reemplazaba a Petcoff, lo que provocaba que Olaetxea retrasara su posición. Sustitución eminentemente ofensiva en aras de cumplir con el triunfo y esperar acontecimientos. Claro que Pepe Mel también movía sus piezas con Jesé y Ale Díez en escena. Variaciones que apenas modificaron el ritmo, lo cual servía para que Las Palmas siguiera cómoda. Tanto que Jesé pudo adelantar a los suyos en un error de Medina, que se quedó para evitar el fuera de juego del canario. Por suerte, como sucediera ante el Fuenlabrada, Santamaría evitaba el tanto.

Sergio Rodríguez no esperó más y puso en el terreno de juego a Bogusz y Leo Ruiz por Pacheco y Nano Mesa. El efecto fueron dos amarillas para Iñaki y Olaetxea, además de un centro del polaco y un remate desviado de Paulino. Pese a ello, Las Palmas administraba los tiempos y disfrutaba de la pelota, aunque sin profundidad, cuestión que provocaba que los blanquirrojos acumularan faltas y nula presencia en campo rival. Mientras tanto, el Sabadell anotaba en Anduva, justo cuando Clemente remataba desviado tras una falta lateral.

Un cuarto de partido y Rubén Martínez aparecía por Paulino para confeccionar una UD Logroñés más física que talentosa. Aridai hacía la empresa más compleja cuando se inventó un golazo que dejaba helados a los riojanos. Con corazón, los riojanos buscaron neutralizar, al menos, la renta. Fue imposible porque no hay capacidad, como casi toda la temporada. Fue una triste despedida de la segunda división con jugadores (Rubén Martínez, Iñaki…) y cuerpo técnico destrozados, con afición enfadada porque no poder disfrutar del sueño en directo y por la sensación de que no se ha puesto todo lo que se debía para salvarse.

Ficha técnica

UD Logroñés: Santamaría; Medina, Álex Pérez, Clemente (Siddiki, min. 78), Iñaki; Paulino (Rubén, Martínez min. 68), Andy, Petcoff (Roni, min. 46), Pacheco (Bogusz, min. 57); Olaetxea y Nano Mesa (Le Ruiz, min. 57).

Las Palmas: Domínguez; Lemos, Curbelo (Coco, min. 80), Cardona, Sergi Cardona (Ale Díez, min. 46); Maikel, Kirian, Sergio Ruiz, Juan Fernández (Clemente, min. 68); Mújica (Aridai, min. 63) y Edu Espiau (Jesé, min. 46).

Gol: 0-1, min. 75: Aridai.

Árbitro: Dámaso Arcediano Monescillo (Comité Castellano manchego). Amonestó a Iñaki (min. 59) y Olaetxea (min. 60), por la UD Logroñés y a Curbelo (min. 32), Sergi Cardona (min. 44), Maikel (min. 55) y Juan Fernández (min. 67), por Las Palmas.

Foto: UD Logroñés

Etiquetas
stats