La portada de mañana
Acceder
La izquierda busca reconstruirse ante el nuevo ciclo político
El PP de Ayuso bloquea la investigación de los negocios de su pareja
Opinión - 'Un español cuenta algo muy sorprendente', por Isaac Rosa

¿Es posible desconectar del trabajo en vacaciones? Diálogo interno y entrenar la mente, claves

¿Es posible desconectar del trabajo en vacaciones? Diálogo interno y entrenar la mente, claves

Rioja2

0

Tras un año intenso con la pandemia como protagonista, para muchos españoles este fin de semana comienzan sus vacaciones. Horas por delante en las que olvidar los problemas del día a día y relajar cuerpo y mente con el fin de volver con más fuerza de cara al mes de septiembre pero... ¿Es posible desconectar realmente?

El experto en Coaching de UNIR Juan Carlos Álvarez, ofrece consejos motivacionales para disfrutar de este periodo al cien por cien y contar con tiempo de calidad y de ocio con los más cercanos.

Lo más importante es tener en cuenta que estos consejos no son “recetas mágicas” sino que son pautas que hay que trabajar para llegar al objetivo principal: desconectar la mente.

Para ello, Álvarez ha explicado en una entrevista a Europa Press que es fundamental “ser conscientes de nuestro diálogo interno”, es decir, “cuando nos notamos que estamos preocupados y que no estamos disfrutando de las vacaciones porque estamos pensando en otras cosas tenemos que parar y saber porqué nos pasa eso”.

“Tenemos que ser conscientes de qué pensamos, qué nos preocupa, a qué le estoy dando vueltas... E incluso no está mal dedicarle unos minutos a ello pero, a partir de ahí, no tenemos que dejar que se apropie de nuestros pensamientos”, ha afirmado.

En este sentido, ha concretado, “si, por ejemplo, lo que te preocupa son problemas de trabajo, tareas que has dejado pendientes o alguna situación concreta de tu entorno laboral, tenemos que centrarnos en esa situación unos minutos pero luego seguir adelante y decir: Ahora no toca. Debemos enfocar nuestros pensamientos en otros aspectos de ocio porque estamos de vacaciones y necesitamos desconectar”.

Se trata de “entrenar un poco la mente” para “lograr disfrutar de nuestro tiempo de ocio”, ha explicado. “Llevamos un año y medio con mucha tensión, mucha presión, una pandemia que nos ha cambiado la forma de vivir... Ahora que podemos disfrutar de un tiempo para nosotros mismos es bueno que éste sea de calidad y estar tranquilos”, ha apuntado.

Además, el profesor de UNIR cree positivo también “tener autoestima, confianza y sentirse bien con uno mismo” para poder disfrutar de este tiempo de vacaciones. Para ello, afirma, “es bueno proponer planes, hacer cualquier cosa que nos guste y que sea diferente a nuestro día a día, conocer en qué voy a ocupar el día y no dudar en proponer algo que nos apetezca o, incluso, hacerlo solos. Sea como sea, se trata de disfrutar”.

También es bueno, ha explicado, “encontrarnos en la naturaleza”. El mar, la arena, la montaña... ,“entornos diferentes que nos permitan salir de nuestros espacios habituales urbanos de oficina o casa porque nos ayudará a percibir las cosas de otra manera. Disfrutar de los olores, del sonido, del paisaje, siendo conscientes de ello nos hará desconectar plenamente y nos sentiremos mejor con nosotros mismos”.

Pero también hay consejos que se pueden realizar en nuestro propio hogar. “Es bueno salir a tomar el aire y buscar paisajes diferentes pero también hay actividades de relajación que podemos hacer en donde estemos. Disfrutar de una buena lectura, ver una serie... Todas esas actividades que durante el periodo normal no hacemos por falta de tiempo ahora se pueden hacer y se pueden disfrutar con calma pero sabiendo lo que estamos haciendo y, sobre todo, valorándolo”, asegura.

Calidad del sueño

El docente de UNIR también señala que es importante tener buena salud en el sueño para contar con un buen descanso en vacaciones. “De repente -ha explicado- terminamos de trabajar un viernes y nos vamos de vacaciones un sábado. Todo en muy poco tiempo y es normal que la mente tarde en desconectar y relajarse. Esta situación también puede generar problemas en el sueño que pueden estar relacionados con el estrés o la ansiedad”.

“Pero ello también se puede regular, tenemos que tener en cuenta que hay técnicas y pautas que nos permiten abordar esta desagradable situación. Podríamos hacer un poco de deporte, movernos un poco físicamente para que el cansancio no sea solo mental”. Además, ha indicado, previamente a las horas de sueño “no se deben realizar actividades que alteren mucho el cerebro ni tampoco es bueno ver películas, informaciones o series de acción que nos activen a esas horas”.

También ayuda no tener una digestión pesada y no comer justo antes de irse a dormir. Apagar la luz de las pantallas móviles y escuchar música relajante o audiolibros sobre asuntos que nos gusten nos harán que nuestro comienzo del sueño sea más placentero.

Por su parte, si uno se despierta a media noche “volvemos a lo mismo del principio”, ha aconsejado. “En ese momento, debemos ser conscientes de qué es lo que estamos pensamos y decir: ¡Ahora no toca! Es momento de pensar en cosas que no nos distraigan del sueño, que nos produzcan bienestar... El trabajo o esos problemas que nos absorben deberán esperar a mañana”, insiste. Si se cuida ese mensaje y se trabaja interiormente “será más fácil conseguirlo”, ha afirmado.

El coach de UNIR ha explicado que la situación de la pandemia ha aumentado bastante estos problemas de dificultad en la desconexión o en la falta de sueño: “La pandemia ha cambiado nuestros hábitos, nuestra forma de relacionarnos, nos hemos tenido que aislar y ha aumentado el miedo, la angustia y la preocupación. El que lo ha vivido de cerca o en primera persona ha sufrido mucho y también tenemos mucho miedo por nuestros familiares, por nuestros amigos, por la situación en general... Todo ello ha generado más ansiedad y estrés que, en muchas ocasiones, no hemos sabido o podido canalizarlo correctamente y esto genera malas sensaciones aunque no nos demos cuenta”.

Es más, ha añadido, “aunque muchos crean estar bien, ocurre en numerosas ocasiones que esa tensión aparece cuando uno deja de trabajar”. En esos momentos, ha explicado, “uno se refugia en el trabajo, en su día a día y tiene una rutina marcada y va saliendo al paso de la agenda, de las fechas de entrega... Entonces, se puede decir que estamos protegidos por nuestra rutina y nuestras tareas pero cuando de repente, dejamos el trabajo y nos vamos de vacaciones y la mente se revoluciona. Todo esto responde a un proceso, no podemos apagar nuestra mente con un botón, hay que trabajarla con pautas para ir habituando la mente”.

Con todo ello, asegura, “se puede enseñar a la mente a desconectar. La mente se entrena, el cerebro es un músculo que va cambiando y se puede moldear en base al entrenamiento, hacer cosas diferentes, ser objetivos, tener resiliencia y no hundirnos. Todo requiere un trabajo y, sobre todo, ganas de hacerlo, los primeros días serán difíciles pero, como todos sabemos, habituarse a lo bueno es fácil”.

Lecturas positivas

Finalmente, el también psicólogo y coach ha propuesto unas lecturas que pueden ayudar a disfrutar al máximo de estos días de ocio entrenando la mente con lecturas positivas como, por ejemplo, 'La biología de la creencia' -de Bruce H. Lipton- que nos da pistas para conocernos y saber cómo influyen nuestros pensamientos en nuestra forma de ser. También recomienda 'Deja de ser tú' de Joe Dispenza o el libro del médico Miguel Ruiz titulado 'Los cuatro acuerdos' sobre cómo uno se habla a sí mismo.

Además, el libro de Arturo Pérez Reverte 'La Cueva del Cíclope' que recoge 'tuits' desde 2010 a 2020 sobre asuntos concretos o 'El entrenador mental' del mismo profesor de UNIR con numerosos ejercicios para trabajar la mente y las emociones son también lecturas recomendadas para estas vacaciones.

Así las cosas, ha finalizado, “tenemos que ser conscientes de que la vida no siempre va a ser de color de rosa, es importante saberlo y darnos cuenta de ello pero, sobre todo, debemos enfrentarnos a esos problemas y para ello son también estos consejos motivacionales. Tenemos que aprender a ser resilientes y ver la capacidad que tenemos de superar la adversidad con nuestras fortalezas y nuestras habilidades. Si nos esforzamos podremos conseguirlo”.

Etiquetas
stats