Sectores y asociaciones empresariales, contra la “imposición” del Ayuntamiento con Calles Abiertas

Diferentes sectores y asociaciones empresariales de Logroño han participado este martes en una rueda de prensa para valorar cómo les están afectando los diferentes proyectos de 'Calles Abiertas'.

En conjunto, los asistentes han asegurado que “no se oponen al cambio de la ciudad” pero sí piden “diálogo y consenso” con el Ayuntamiento de Logroño y evitar la “imposición” a la que “nos están sometiendo”.

En la convocatoria han participado representantes de las asociaciones de comerciantes de Zoco, Zona Oeste Comercial, Vara de Rey y Adyacentes (Acovara), Casco Antiguo, San Antón, Mercado del Corregidor, Distribución, Transportes y Logística (ATRADIS), Panaderías, Agencias de Viajes, Colegio Oficial de Agentes Comerciales, ARIAUTO, FER Comercio, Asociación Riojana de Hoteles, Hostelería Riojana, Discotecas, Salas de Fiestas y Ocio Nocturno, Calle Laurel y Calle San Juan.

El primero en tomar la palabra ha sido Santiago Gutiérrez, de ATRADIS (Asociación de Transportistas y Logistas de La Rioja) quien ha reconocido que aunque su sector es “ruidoso y molesto” es “muy necesario” para hacer llegar a los comercios “los productos que venden”. Como destaca “el sector está de acuerdo en que la ciudad tenga que ser más verde, más limpia y amigable pero no nos parece correcto la forma en la que se está haciendo”.

Así, ha asegurado, “hemos pedido que se nos consulte para poder dar nuestra opinión y que no sea una imposición, como finalmente han hecho las cosas”.

Como soluciones, desde el sector proponen que “se permita que los vehículos de reparto puedan permanecer más tiempo en zonas peatonales” o “que estos vehículos puedan aparcar en las zonas azules, en los tiempos de carga y descarga, sin necesidad de coger tiquet”.

Equilibrio de la actividad y los cambios

Por parte de FER Comercio, Fernando Cortezón ha explicado que este sector “siempre se ha adaptado a la ciudad, nunca ha habido una oposición frontal a la modernización de Logroño, pero siempre hemos demandado un diálogo continuo que nos permitiera equilibrar la actividad comercial con los cambios urbanísticos”.

Para Cortezón, las decisiones deben ser “consensuadas” y reflexiona: “Si hacemos de la experiencia de compra algo negativo nuestro comercio, el de debajo de casa, puede verse perjudicado”.

En estos momentos, “Logroño se ha convertido en una ciudad muy poco amable para las compras”, ha lamentado. Así, se ha referido a la falta de plazas de aparcamiento en superficie, “se han eliminado 600”, o a la “falta de medidas de acompañamiento, como el incremento del transporte público”. A ello ha añadido que las rutas “son ahora más largas para recorrer la misma distancia, lo que genera atascos y contaminación”.

“La ciudad es de todos”

Por parte del Colegio de Agentes Comerciales de La Rioja, Mariola Bravo, ha compartido las opiniones de los intervinientes anteriores a la vez que ha destacado los actuales problemas de acceso que se encuentran para desarrollar su trabajo. Así, ha afianzado, “entendemos que lo correcto es escuchar a los profesionales que quieren desarrollar su actividad y encontrar soluciones para todos” porque “la ciudad es de todos”.

Además, Eduardo de Luis (de ARIAUTO) ha criticado que el Ayuntamiento de Logroño no ha puesto en marcha una zona de bajas emisiones que se debería haber incorporado en mayo de 2021. “El Ayuntamiento no ha hecho esa obligación y, sin embargo, dificulta directamente el tráfico de acceso al vehículo en todas las entradas importantes de Logroño”, ha dicho “Ha faltado diálogo, medidas consensuadas”, ha insistido, apuntando que “el medio ambiente es muy importante, pero desde el Ayuntamiento no se está persiguiendo este fin, sino dificultando la entrada de vehículos, emita o no”. “Es muy reprochable la actuación municipal”, ha indicado. .

Ciudadanos “enfadados”

Finalmente, Francisco Martínez Bergés, presidente de Hostelería riojana, ha asegurado que el sector “piensa en una ciudad verde, limpia y siempre hemos estado ahí para adoptar las decisiones que se nos han pedido. Pero con 'Calles Abiertas' lo único que se ha conseguido es que los ciudadanos estén enfadados, con 14 vueltas para llegar a un sitio, atascos y no solo en el casco Antiguo, sino en toda la ciudad”.

Una situación -ha dicho- que también afecta a los turistas que llegan a la capital. “Vivimos no solo de los ciudadanos de Logroño, también de los de los pueblos, que vienen a comprar y gastar su dinero

“Es hora de decir basta, la falta de diálogo y transparencia es impresionante”, ha insistido.

Con todo ello, ha afirmado, “parece que llegamos tarde porque ya tenemos la mitad de la ciudad patas arriba, nosotros estamos dispuestos a colaborar pero se nos tiene que escuchar. El otro día el alcalde defendió 'Calles Abiertas' frente a 'mentes cerradas' y yo digo 'oídos sordos, decisiones dictatoriales'”.

Y ha indicado que en otras ciudades parecidas a Logroño donde se han emprendido actuaciones de este tipo han supuesto caídas de valor de las viviendas de un 30% y pérdidas de un 40% de la actividad. “Igual el dinero que viene de Europa en vez de mejorar, perjudica”, ha finalizado.