“Los roles del hombre y la mujer van cambiando y no tan lentamente”

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En 2009, 104.100 nuevas mujeres activas, frente a 196.300 hombres menos. En La Rioja además la tasa de actividad femenina ha subido más que la media nacional, 0,97 puntos hasta el 51,46% ¿La mujer aguanta mejor en tiempos de crisis?

El sector servicios es el que más feminizado está. Con la crisis que llevamos arrastrando desde el año pasado, el sector inicial que más ha sufrido ha sido el de la construcción, donde mayoritariamente trabajan hombres y esto ha derivado que en muchos casos mujeres amas de casa que abandonaron la vida laboral han tenido que reincoporarse. En este momento los empleos a nivel de mujeres están incluidos en el sector de servicios. El problema está, según hemos conocido por los últimos datos de la EPA, en que el sector servicios es el que más ha caído en empleo. Es decir, en este momento estamos detectando que la crisis está golpeando a ambos sexos.De esos 196.300 hombres que han abandonado el mercado laboral, 42.000 lo han hecho para volver a sus hogares a dedicarse a las tareas domésticas. En 2009, el número de varones dedicados a las labores domésticas ha aumentado un 14,1% mientras el de las mujeres ha disminuido un 4,7% ¿Cree que esto favorece la igualdad entre hombres y mujeres?

Que los hombres, forzosamente, hayan tenido que asumir una serie de trabajos de los denominados de amas de casa, les va a servir para que vean la importancia de los trabajos que se hacen dentro de una casa, que no tiene remuneración y que ójala se pueda conseguir en un futuro.Al igual que se está poniendo en marcha la Ley de la Dependencia, quizás en un futuro se pueda reconocer económicamente el trabajo de la mujer en casa.

Es una de las grandes apuestas por la que llevamos muchos años trabajando porque entendemos que el trabajo que se realiza dentro de la casa es esencial y, por lo tanto, debería tener el mismo tratamiento que cualquier otro tipo de trabajo. Es muy complicado y en estos momentos más.¿Por qué mientras que en la UE el salario de las mujeres es inferior en un 15% al de los

hombres, en España es un 26,3% menos? En el caso de las mujeres riojanas cobran casi 500 euros menos que sus compañeros.

Según los datos del último informe de UGT de ganancia media anual en La Rioja, los hombres tienen una media de 20.271,24 euros frente a las mujeres que tienen 14.700. Se está trabajando para que el 22 de febrero se convierta en el Día Internacional Contra la Desigualdad Salarial entre Hombres y Mujeres porque tendríamos que trabajar hasta el 22 de febrero del año siguiente para cobrar lo mismo que un hombre en un año. Lo que estamos detectando es una masculinización o feminización de determinados empleos y sectores y dependiendo del sector, los convenios y las remuneraciones son diferentes y tienen mayores o menores salarios y condiciones laborales. Por lo tanto, de lo que se trata es de equiparar esa diferenciación entre sectores.La mujer sufre mayor fragilidad en el trabajo en cuanto a temporalidad, por ejemplo, y además, con el tema familiar, cede ella para acogerse a la jornada reducida o excedencias y eso propicia a su vez que pueda acceder a altos cargos de responsabilidad con un mayor sueldo.

A pesar de la Ley de Igualdad entre Mujeres y Hombres, a pesar de todo tipo de acuerdos y protocolos establecidos, las cúpulas de dirección de las empresas mayoritariamente son de hombres. Eso es chocante porque las mujeres en este momento son con mucha diferencia las que mayor formación tienen a nivel de titulaciones. Las mujeres utilizan más la reducción de jornada o excedencias para el cuidado de la familia o los hijos y el problema es que hay una cuestión de culturalidad. Un hijo es de dos y lo mismo puede hacer una reducción de jornada el padre que la madre.¿Cómo puede ser que España tenga un índice de natalidad de los más bajos del mundo y que a la vez la diferencia salarial sea mucho más acusada en este país que en el resto de Europa? Parece que el componente de la cultura popular en España, de los roles del hombre y la mujer en este país cobra una gran importancia.

Va cambiando y no tan lentamente. Afortunadamente es uno de los logros que las mujeres vamos alcanzando y lo vemos en la comparativa con nuestras abuelas, nuestras madres, nosotras y nuestras hijas. Los pasos que vamos dando son muy grandes y los cambios a nivel familiar, cultural y educativo están generando que las mujeres tengan más posibilidades formativas que nuestras madres y que puedan acceder a un empleo cualificado. Esa baja natalidad se da por el aumento de formación de las mujeres y por la concienciación en el mundo laboral y personal.

Ahora la decisión para una mujer quizás no sea entre elegir entre una vida laboral o una vida familiar, sino en promocionarse dentro de la empresa o tener un hijo, puesto que ambos momentos suelen coincidir.

Es una decisión muy personal pero sí que es cierto que la tendencia va por ahí. Son mujeres jóvenes que se han formado y que una vez que encuentran un empleo acorde con esa titulación lo quieren mantener. Eso lo han estado haciendo los hombres, pero la diferencia es biológica porque somos las mujeres las que tenemos los hijos. Ahora tenemos hijos con una edad más avanzada que a la que los tenían nuestras madres pero cada mujer debe decidir qué es lo que quiere en ese momento.Quizás dar un paso adelante en este sentido sería que obligatoriamente por Ley se estableciera el mismo tiempo de baja por tener un hijo para el hombre y la mujer.

En este momento llevamos poco tiempo desde que se implantó la baja por paternidad y desde UGT siempre hemos pelado para que el tiempo de maternidad y paternidad sea superior e igualitario precisamente por eso. Una cosa es que la mujer necesite biologicamente y físicamente un tiempo de recuperación y otra cosa es que el padre no pueda acceder a esa baja, que en este momento es la mujer la que mayoritariamente la tiene. Salvando las ocho primeras semanas, que son las que obligatoriamente tiene que tener la mujer para una recuperación física, el resto las puede coger el hombre. El problema está en que no las coge. Salvo en casos muy concretos o escasos es la mujer la que finaliza la baja por maternidad y es la mujer quien, si es necesario, hace algún tipo de reducción de jornada o excedencia. Una pareja con un niño no tiene posibilidad de tener plazas en guarderías públicas y tiene que tomar una decisión. Sí hay guarderías privadas, pero depende del tipo de salarios.Muchas veces, el sueldo de una jornada reducida va directamente para la guardería.

Depende de los sectores. Si son sectores con salarios más bien escasos, lo que te cuesta la guardería se lleva una gran partida de tu salario, con lo cual hay un componente económico también. El porcentaje de hombres que se cogen la reducción de jornada o excedencia es simbólico. También es tristemente curioso esas connotaciones culturales de que está un poco como mal visto. Las mujeres cogemos una reducción de jornada o excedencia y a nadie le extraña. Si la coge un hombre hay comentarios de todo tipo. Ójala hubiera más hombres que la pudieran coger. Es un componente cultural que perjudica a las mujeres y a los hombres.¿Qué países podíamos tomar como referencia en este sentido?

Los países nórdicos están muy avanzados a efectos de igualdad. No sé si en Finlandia o Suecia en el Parlamento hay más mujeres que hombres y con eso lo decimos todo.Esa diferencia salarial, la jornada reducida, las excedencias, etc. repercute luego en la

mujer en su prestación por desempleo, en las pensiones, etc.

En todo. Hasta hoy, las pensiones se cotizan según los últimos 15 años. Por lo tanto, si una mujer tiene un 'in-pas' de tiempo abandonando el mercado laboral, las cotizaciones le van a bajar mucho. Si a eso sumamos que tienen salarios menores, que han trabajado menos y si encima no tiene formación, pinta un cuadro bastante feo para una mujer que ha dedicado su vida en una parte a nivel laboral y en otra a nivel personal o a la familia. En muchos casos no llegan a las cotizaciones y su vida de jubilada depende de su marido y eso es triste. Las mujeres somos más del 50% de población en España y tenemos mucho que decir.¿Cree que medidas como la paridad en los ministerios tiene un efecto real en la calle?

De un día para otro no, pero son propuestas que poco a poco van calando. A medio y largo plazo quiero pensar que sí que van a tener una repercusión a nivel educativo, cultural, social, laboral, político... Es muy importante que se vea, no que tenemos que demostrar, sino que podemos hacer el mismo trabajo que un hombre.Quizás es que una mujer en un cargo así se le cuestiona.

¿Por qué no se piensa que esa mujer está ahí porque vale para hacer ese trabajo? Si tanto un hombre como una mujer cumplen el perfil para desarrollar ese trabajo, se decantará por uno o por otra. Actualmente lo que ocurre es que se decantan más por hombres que por mujeres y de ahí las políticas activas de discriminación positiva hacia las mujeres.Tenemos vicepresidentas, ministras de Defensa... pero ¿usted ve a una presidenta del Gobierno de España?

Para las próximas elecciones, sinceramente no lo veo pero yo creo que puede haberla y sí me gustaría. El caso es ir dando pasos. En este momento tenemos un gobierno de paridad y eso es muy importante. En el mundo ya hay presidentas y muy buenas que además están demostrando otra manera de hacer política por nuestra forma de plantear las cosas, de trabajar, de interactuar, de buscar soluciones y consensuar. Es más integradora, más conciliadora.

Se puede ver como una moda porque parece que se vende bien lo de la mujer y para el político la imagen es muy importante ¿Cree que se utiliza a la mujer como un elemento de apoyo popular?

Yo creo que los políticos en España no son tontos, con lo cual si tienen a una mujer en un puesto de responsabilidad es porque piensan que lo puede hacer bien. No veo ni quiero ver que un político tiene una mujer a lado para hacerle ganar votos porque eso puede ser con una mujer o con un hombre.Tampoco vemos dirigentes femeninas en los sindicatos, que siempre han representado la lucha.

Te voy a poner un ejemplo. La Comisión Ejecutiva de UGT de La Rioja somos cuatro hombres y tres mujeres. Las áreas que llevan las mujeres son Organización, Empleo y Salud Laboral y Formación e Igualdad, carteras con un peso muy importante.