El Ejército mexicano mata a cinco miembros de grupos de narcotraficantes
Efectivos del Ejército mexicano mataron ayer a cinco personas en un tiroteo ocurrido en el interior de un hotel en la localidad de Santa Catalina, situada en el estado de Nuevo León (noreste del país). Respondían a los disparos de un grupo de personas armadas.
Los militares se encontraban patrullando la zona cuando recibieron una denuncia anónima que les informó de que había un grupo de hombres armados en el motel Del Bosque, situado en Santa Catalina. Al acercarse al lugar, sin embargo, el grupo de desconocidos armados abrió fuego contra ellos.
En total murieron en el enfrentamiento cinco personas, dos de los hombres que dispararon contra los militares y otras tres mujeres que les acompañaban. Sus restos fueron trasladados a un hospital universitario cercano, donde se procedió a realizarles la autopsia.
En el hotel donde tuvo lugar el tiroteo las fuerzas de seguridad encontraron diversos vehículos, armas largas y varios tipos de granadas, informa el periódico local Milenio.
Felipe Calderón, preocupado por el tráfico de armas desde EEUU
El mismo día en que se producían estas últimas muertes por la ‘guerra del narcotráfico’, el presidente de México, Felipe Calderón, afirmaba que los grupos de poder de Estados Unidos parecen estar bloqueando las iniciativas para impedir el tráfico de armas desde Estados Unidos hacia México, una de las medidas fundamentales en la lucha de las autoridades mexicanas contra las organizaciones del narcotráfico y la violencia que generan en el país.
“Ellos [los funcionarios estadounidenses] dicen que están enfrentando una fuerte oposición y que hay poderosos grupos de cabildeo en el Congreso para cambiar esa situación”, declaró Calderón en una entrevista retransmitida este domingo en el programa GPS de la cadena CNN, refiriéndose a las presiones de los ‘lobbies’ estadounidenses.
El mandatario mexicano afirmó que la resolución del problema del tránsito de armas a través de la frontera es fundamental en el marco de las medidas contra la violencia relacionada con la droga.
México asegura que el 90 por ciento de las armas de las bandas del narcotráfico proceden de Estados Unidos, a menudo legalmente. En este sentido, las autoridades mexicanas quieren que se restablezca la prohibición a la venta de armas de asalto que no se renovó en 2004. Sin embargo, grupos como la Asociación Nacional del Rifle estadounidense se oponen a tales medidas.
En los últimos dos años unas 4.600 personas han muerto en incidentes relacionados con el tráfico de estupefacientes en el país sudamericano.
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