El futuro de Bakiyev

Kirguistán sigue viviendo una tensa situación interna. El Gobierno provisional kirguís enviará tropas al sur del país para capturar al presidente depuesto, Kurmanbek Bakiyev, en caso de que éste no se rinda y dimita formalmente antes de que acabe este martes, afirmó Azimbek Beknazarov, actual encargado de la seguridad interna del país centroasiático.

“Hemos eliminado su inmunidad presidencial... Queremos que [Bakiyev] lo ponga de relieve [su dimisión formal como presidente del país]. Pero él continúa congregándose con sus seguidores en la ciudad de Jalalabad”, afirmó Beknazarov.

El encargado de la seguridad interna ha asegurado que se ha abierto “una investigación criminal contra el antiguo presidente. Si no dimite formalmente hoy [...] pondremos en marcha una operación para detenerle”.

Tan sólo un día antes, la jefa del Gobierno de Kirguistán, Rosa Otunbayeva, aseguró que se podría ofrecer al depuesto presidente Bakiyev un incentivo para que abandone el país.

“Todo el mundo le está pidiendo que deje solo al pueblo kirguís, y que Bakiyev pueda encontrarse un lugar fuera de Kirguistán”, aseguró Otunbayeva a los periodistas después de reunirse con el enviado especial de la Unión Europea para Asia Central, Pierre Morel. “Bakiyev ya ha presentado la cuestión de qué conseguirá a cambio”, afirmó. “Estamos trabajando ahora mismo, en cierta medida, en esta pregunta”, aseguró.

Por su parte, Bakiyev aseguró también que cree que el pueblo de Kirguistán aún está de su parte,

según recoge la agencia de noticias rusa RIA Novosti. Estas afirmaciones se produjeron durante una manifestación realizada por los seguidores de Bakiyev en su aldea natal, situada en las afueras de Jalalabad, en el suroeste de Kirguistán. La manifestación ha implicado a unas 500 personas.

“Si me sintiera culpable, no estaría aquí y habría huido como hizo el ex presidente Askar Akayev. El pueblo está con nosotros, no creo que hayan cambiado su respaldo”, afirmó. Bakiyev, que ha prometido no dimitir.