El PR considera que Caja Madrid no es un “buen compañero de viaje” para Caja Rioja

“Caja Rioja, lejos de buscar una consolidación entre iguales, ha apostado por un absorción por parte de Caja Madrid”, con estas palabras, el presidente del Partido Riojano, Miguel González de Legarra, definía hoy en la comparecencia que ha ofrecido junto al secretario general del partido, Miguel Gómez Ijalba, la participación de Caja Rioja junto a otras cinco cajas españolas en un SIP (Sistema Institucional de Protección) del cual Caja Madrid es líder indiscutible.

Legarra ha asegurado que la propia Caja Madrid asegura que “el SIP beneficiaría su negocio y el nuevo grupo consolidaría a Caja Madrid como la segunda caja nacional”, además el presidente regionalista ha declarado que la caja madrileña “cree que esto es una excelente oportunidad para solventar los problemas financieros que presenta, y ha recurrido a esta fusión que hace dos meses rechazaba”.

Las perspectivas negativas que el PR atisba en cuanto a esta operación vienen dadas porque la fusión hace partícipe a todas las cajas integradas en ella tanto de los beneficios como de los perjuicios, “hay una escasa capacidad de maniobra frente a acontecimiento inesperados”, ha declarado Legarra.

González de Legarra también ha querido informar de las expectativas puestas en esta fusión por parte de Caja Madrid, que por sí misma, según ha indicado, no puede acceder al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) “y necesita acceder a esas cajas para cubrir el 25% de los activos”, porcentaje que supone 3.000 millones de euros, (el total de Caja Rioja).

Con estos datos sobre la mesa el presidente del PR ha desvelado como, a juicio de su partido, los intereses políticos sobrevuelan la operación, “todas las cajas buscan procesos de fusión entre iguales”, ha apuntado, “pero la de Caja Madrid ha sido recurrir a un proceso político lejos de un interés financiero”.

Y, según Legarra, el Partido Popular tiene mucho que ver en este entramado político, pues los consejos de dirección de esta cajas están formados por afiliados a dicho partido, “son consejos politizados por el PP, que es el que ha puesto al servicio de Rato y Aguirre el botín de unas cajas de ahorro que les permita acercarse al 25% que necesitan”.

“Esa ambición del PP a nivel nacional”, ha afirmado Legarra, “unido al pánico que a los caciques de las regiones les da perder el poder y el control lleva a esta fusión, que puede perjudicar a las finanzas de La Rioja”.

El dirigente del PR ha asegurado que no tiene nada contra Caja Madrid, pero ha considerado que “hay que elegir mejores compañeros de viaje, y Caja Madrid no es el mejor” porque es más óptimo trabajar “con iguales”, ya que en este caso se da “una clara existencia de un control político de Caja Madrid”.

Por su parte, el secretario general del PR, Miguel Gómez Ijalba , ha querido desvelar como las cajas que participen de la fusión, “aunque mantengan la personalidad jurídica”, al final acaban actuando, y siendo apreciadas, como una sola entidad, “en Europa este tipo de fusiones son conocidas, y nadie conoce a las entidades que las componen”.

Pero una pérdida de identidad no es el único problema que preocupa al Partido Riojano, “el capital interno de cada uno de los componentes responde por las deudas de los otros”, ha incidido Ijalba, “y Caja Madrid va a pedir 3.000 millones de euros, que es el total de los activos de Caja Rioja, y no sabemos si en cinco años va a garantizar tenerlos”

A pesar de que todas las cajas conserven su personalidad jurídica, “sólo una de ellas responde ante el Banco de España”, ha asegurado Ijalba, “y ésa será Caja Madrid”. El secretario regionalista también ha informado de que “cualquiera que quiera abandonar la fusión tendrá que comunicarlo 24 meses antes”, siendo éste un periodo de tiempo tan extenso Ijalba considera que la situación del que decida abandonar“será mala” durante ese espacio de tiempo y que es por eso que “la práctica totalidad de los que se meten en un SIP perduran”.

Gómez Ijalba también ha declarado que Caja Madrid tiene, en todas las comunidades a las que pertenecen las cajas que ha elegido, “como máximo 8 oficinas”, mientras que dichas cajas electas “son líderes de esas regiones”.

Así pues el Partido Riojano, revelando que en el contrato que firmarían las diferentes entidades ha de reflejarse el mínimo de la fusión, ha considerado que “habría que estar muy atento a la firma de ese contrato” por lo que, ya que es una operación que afecta a la comunidad, “debería ser público”, puesto que “se obliga a las entidades a abonar un 40% de los fondos totales, y estos beneficios van a un fondo común, del cual una caja ahora débil, pero fuertemente consolidada, como Caja Madrid, se podría beneficiar”.