Guillermo Fariñas pospone la huelga de hambre y regresa a casa

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El disidente cubano Guillermo Fariñas ha abandonado la huelga de hambre y la alimentación artificial que ha mantenido durante 134 días para volver a su casa, precisando que su ayuno se ha pospuesto hasta el 7 de noviembre, fecha en la que vence el plazo dado por el gobierno cubano para liberar a los 52 reos políticos acordados entre éste y la Iglesia Católica.

Fariñas afirma que se ha sentido “disminuido físicamente, con mucho dolor en el cuello por el trombo y dificultades al andar y bien de ánimo”, declaró por teléfono desde su casa de Santa Clara, a unos 300 kilómetros al este de la capital. El disidente cubano comenzó una huelga de hambre en febrero, cuando rechazó comer o beber pero sí aceptó la hidratación y alimentación por vía venosa para pedir la liberación de una decena de presos políticos que se encontraban enfermos. Pospuso su huelga al 8 de julio y tomó su primer vaso de agua, en respuesta al anuncio de liberaciones de reos políticos tras las negociaciones entre el gobierno de Cuba, la Iglesia Católica de la isla y el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación español Miguel Ángel Moratinos.

Desde entonces 20 presos políticos fueron liberados y viajaron a España con sus familiares, entre ellos, Ariel Sigler que recibió una visa humanitaria del gobierno de Estados Unidos y que se encuentra en Miami para recibir tratamiento médico.

“Nos alegramos de las liberaciones, pero nos hubiese gustado que no fueran de la prisión al aeropuerto, que pasaran por sus hogares”, señaló Fariñas. Sin embargo, admitió que “a veces en las negociaciones hay que ceder”. Su ayuno se ha vuelto a posponer al 7 de noviembre, fecha en que se vence el plazo dado por el gobierno para liberar a los 52 reos políticos.

“Hay que ver si se cumplen los objetivos, quedan varios presos políticos que decidieron no irse [de Cuba] y no están liberados. Hay que esperar a ver si el gobierno cumple o si solo buscó disminuir tensiones”, ha declarado el opositor cubano.

El caso de Sigler

El disidente cubano excarcelado el pasado día 12 de junio por parte del Gobierno cubano, Ariel Sigler Amaya, se encuentra en Miami para recibir tratamiento médico debido a su delicado estado de salud. Afirmó que su salida de Cuba “es sólo un hasta pronto”.

Sigler, que recibió permiso del Gobierno cubano para viajar a Estados Unidos y recibir tratamiento, ha declarado que permanecerá en Miami hasta que se recupere de las lesiones y enfermedades que padece a consecuencia de siete años que permaneció en cárceles de la isla. Su intención es volver a Cuba cuando desaparezca el Gobierno de los hermanos Castro, al que pronosticó una duración muy corta. “Yo sé que firmé mi salida definitiva. Pero yo soy un patriota. Yo quiero irme a Cuba. Mi salida fue sólo un hasta pronto”, afirmó Sigler en conversación telefónica con Europa Press.

Por el momento, aun no ha decidido si pedirá asilo político en Estados Unidos para instalarse allí definitivamente. En cuanto a su estado de salud, los médicos le darán su diagnóstico próximamente, ahora sólo le están haciendo diferentes pruebas médicas. Anímicamente, Ariel afirmó ha mejorado por el hecho de encontrarse con su familia y “en una patria libre, en una democracia”.

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