La UE no expedientará a Francia
La polémica sobre la política francesa de inmigración
en la Unión Europea (UE) parece zanjada. Así se desprende al menos de la postura de la vicepresidenta de la Comisión Europea y responsable de Justicia, Viviane Reding, quien ha anunciado que acepta la promesa de Francia de que cambiará su legislación y renuncia a abrirle un expediente en relación con las polémicas expulsiones de gitanos rumanos de este verano.
La modificación de la legislación gala incorporará todas las garantías previstas en la directiva sobre libre circulación de personas de la UE.
El Ejecutivo comunitario mantenía la amenaza de expedientar a París si, antes del 15 de octubre, las autoridades francesas no se comprometían a ajustar su legislación a la directiva europea. Al margen de esta cuestión menor, Bruselas había renunciado ya a sancionar a Francia por discriminación en las expulsiones de gitanos, pese al anuncio en este sentido de Reding.
“Tras los compromisos oficiales asumidos por Francia el pasado viernes, la Comisión Europea suspende el procedimiento de infracción”
, ha dicho la responsable de Justicia en un comunicado. El Ejecutivo comunitario, no obstante, “seguirá atento y vigilará que los compromisos asumidos por Francia se apliquen completamente”.
El gobierno de Nicolas Sarkozy ha respondido a las peticiones de Bruselas “de manera positiva, constructiva y en los plazos previstos”, según Reding. El pasado viernes, las autoridades francesas aportaron un proyecto de medidas legislativas y un calendario creíble (hasta principios de 2011) para introducir en la legislación gala las garantías de procedimiento que exige la directiva sobre libre circulación.
“Francia ha hecho lo que le ha pedido la Comisión Europea”, se ha felicitado la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario. A su juicio, ello “demuestra el buen funcionamiento de la UE en tanto que comunidad de derecho”.
“La situación de los gitanos en Francia el verano pasado ha suscitado fuertes preocupaciones. Es por eso que la Comisión Europea, y yo misma, hemos seguido de muy cerca los acontecimientos los últimos meses”, ha recordado la comisaria de Justicia.
Reacciones
Ante esta postura europea, las reacciones en el contexto internacional no se han hecho esperar. Desde España, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, ha pedido a la UE que preste “más atención” a la “problemática” de la población gitana apostando por una política de “integración” de estas comunidades.
Así se ha pronunciado en rueda de prensa conjunta con su colega rumano, Teodor Baconschi, de visita en Madrid, y en la que ambos han evitado valorar la renuncia de la Comisión Europea a expedientar a Francia.
“Tenemos que solicitar a la UE que preste más atención a toda la problemática de los gitanos. Hace falta una política europea que preste más atención y con una estrategia diferente a la que hasta ahora se había llevado a cabo”, ha resumido.
Mientras, en el ámbito de Naciones Unidas, su secretario general, Ban Ki-moon, ha mostrado ante la Eurocámara su preocupación por el discurso contrario a la inmigración que se está abriendo paso en Europa y criticado a quienes utilizan el estereotipo para “alimentar el odio”. “Emerge una peligrosa tendencia: una política de polarización”, ha dicho entre los aplausos de los eurodiputados.
En su opinión, los inmigrantes sufren “de forma desproporcionada”, tanto dentro como fuera de Europa, el paro, la discriminación y la desigualdad de oportunidades en escuelas y centros de trabajo. “Algunos se ceban en los miedos de la gente e invocan valores liberales para causas no liberales”.
Ban Ki-moon ha denunciado igualmente a quienes “acusan a los inmigrantes de vulnerar los valores europeos” porque, a su juicio, son a menudo “los acusadores” quienes violan dichos valores. En este sentido, ha considerado que la tarea fundamental de la UE es que los inmigrantes, sobre todo los musulmanes, no sean estereotipados. “El mundo no puede tolerar una Europa que haga esto”, ha resaltado.
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