Más esfuerzos para acabar con las minas antipersona

Los daños y el dolor que dejan las minas antipersona es por todos conocidos: amputaciones, cicatrices, muertes… Por eso acabar con este tipo de armamento tiene que ser una prioridad para la comunidad internacional. Con motivo de la Convención sobre la prohibición de las minas antipersona, el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon ha recordado el trabajo que aún queda pendiente en esta materia.

“Las minas antipersona continúan aterrorizando a poblaciones y negando a comunidades enteras los medios para reconstruir sus vidas”, subrayó Ban .

Según el secretario general de la ONU, aún queda mucho trabajo por hacer a pesar del progreso conseguido en la lucha contra este tipo de armas. Tal como reconoció el propio Ban, 156 naciones han destruido al menos 42 millones de minas y su producción y transferencia es casi inexistente en la actualidad.

La Convención debería impulsar a sus miembros a abordar los aspectos humanitarios, socioeconómicos y medioambientales del uso de esos artefactos, especialmente en zonas densamente pobladas, especificó.