El gobierno mexicano sigue enfrentándose a la violencia en 2011

Rioja2

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El nuevo año no ha dado una tregua al gobierno mexicano de Felipe Calderón en su lucha contra el narcotráfico y los grupos violentos que operan en el país. Tras los primeros días de 2011, el balance no podía ser más desolador: once muertos, el ataque a un diario y las dimisiones de 10 policías.

Uno de estos hechos se ha producido en el estado de Durango, donde al menos 11 presos han muerto en el marco de los enfrentamientos desatados en el Centro de Readaptación Social Gómez Palacio, según informó el diario mexicano El Universal.

El suceso tuvo su origen en una pelea que comenzó alrededor de las 17.30 de la tarde (00.30 de la madrugada del miércoles en la España peninsular) cuando varios reos atacaron a algunos de sus compañeros con armas blancas. Los fallecidos acababan de ingresar en el centro penitenciario por delitos contra la salud pública y secuestro.

Sin embargo, esta nos es la primera vez que un enfrentamiento entre reclusos acaba con la vida de varios de ellos. El 20 de enero del año pasado, 24 personas murieron en la cárcel de Cereso, ubicada también en Durango, en una pelea entre bandas rivales que se disputaban el control del penal.

Por otro lado, los ciudadanos de México han visto como recientemente un grupo de desconocidos atacaba la sede del diario El Norte , del grupo Reforma, ubicada en la ciudad de Monterrey, en el estado de Nuevo León, fronterizo con Estados Unidos, según informaron medios locales.

El ataque se llevó a cabo con una granada de fragmentación que provocó daños considerables en la fachada de la sede del periódico local, sin que se hayan registrado heridos.

El portavoz de seguridad de Nuevo León, Jorge Domene, informó de que no había conocido otros hechos contra medios escritos en ese estado. “Hasta este momento no se habían dado estos casos. En años pasados un canal de televisión también sufrió esto. Es el primero que se presenta”.

El ataque se dio horas después de que miembros del crimen organizado amenazaran con atacar medios de comunicación, que según estos grupos, son los que informan de manera parcial sobre la narco guerra que existe en México.

El pasado 9 de enero se registró otro atentado en el que fueron lanzadas dos granadas contra el edificio del grupo de comunicación Televisa en la ciudad de Piedras Negras, en el estado de Coahuila. Los artefactos no causaron daños porque no llegaron a estallar.

Amenazas

Por último, el gobierno de Felipe Calderón ha visto como las amenazas de los narcos conseguían debilitar y asustar a los agentes de policía de un municipio del estado de Jalisco. Así, Santa María del Oro cuenta a partir de ahora con un solo policía, ya que sus diez compañeros dimitieron entre el domingo y el martes ante las amenazas de las organizaciones criminales que operan en la zona.

Un comandante es el único agente con el que cuentan los escasos 600 vecinos de dicha localidad para garantizar su seguridad y el orden público tras la desbandada del resto de policías, sobre la que el cuerpo no ha querido pronunciarse, según informa el diario El Universal.

Esta deserción colectiva se produce apenas una semana después de que sicarios de grupos rivales del narcotráfico se enfrentaran a balazos en un rancho de Zipoco, una área limítrofe entre Jalisco y Michoacán, sin que hubiera que lamentar daños personales.

Los continuos conflictos entre bandas criminales obligaron a suspender las fiestas patronales de la Virgen de Guadalupe, cuya celebración estaba prevista entre el 3 y el 12 de enero, por miedo a que desencadenaran un baño de sangre.

No sería la primera vez que unos festejos religiosos sirven de excusa a la delincuencia organizada para perpetrar sus ataques, ya que el pasado 10 de diciembre, 13 personas murieron y 22 resultaron heridas durante los disturbios ocurridos en las fiestas en honor a la misma virgen en el municipio de Tecalitlán.

Desde hace meses distintos sectores sociales de Jalisco han solicitado al gobierno de Felipe Calderón la presencia del Ejército en las calles para contener la ola de violencia que recorre el estado, informaron medios locales.

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