“Nosotros planteamos un proyecto turístico dando prioridad a las bodegas”

¿Cómo surge este enfrentamiento por la ecociudad entre ambas administraciones, consistorio y gobierno regional?

Esta situación comienza al tomar posesión de mi cargo en junio de 2007 cuando José Musito deja ser concejal de Desarrollo Urbano y empieza a trabajar para la empresa de Luís Martínez de Benito. Él es la primera persona que viene a plantearme este proyecto de la Ecociudad a finales del mes de agosto- principios de septiembre. Consistía en una recalificación del terreno de Monte Corvo para llevar a cabo el proyecto. Por mi parte se estudia, pero le comunico que es una barbaridad urbanística. Le propongo otros terrenos más adecuados para desarrollar un proyecto de este tipo.

¿Qué proyecto pone el ex concejal sobre la mesa?

No traía un proyecto. Sólo la idea de recalificar la zona para un desarrollo urbanístico. Hasta ese momento el Ejecutivo de Pedro Sanz no tenía relación alguna con la ecociudad. Es a finales de septiembre cuando me llega una información del Gobierno riojano de lo que pretende hacer: publicar una oferta para elegir un terreno donde desarrollar una Ecociudad. Curiosamente todos los parámetros que se marcan en el proyecto (recogida de aguas, por ejemplo) hacen indicar que es en el Monte Corvo donde quieren edificarla. Se presentan 13 proyectos a concurso en diversos ámbitos de La Rioja y, sin embargo, el Gobierno regional elige precisamente el de Luís Martínez, cuya empresa ha construido el 50% de las casa del Instituto Riojano de la Vivienda en los últimos 15 años. Por tanto, muy vinculado al Gobierno del PP y a su gestión.

¿En qué momento surge el conflicto?

La confrontación surge entonces, ya que hasta ese momento el ayuntamiento ofrecía una salida alternativa al Monte Corvo, que es una zona de protección paisajística y medioambiental. Se les ofrecen otros terrenos para hacer una importante zona verde. Son cuatro ámbitos distintos: dos muy cercanos al Monte Corvo y calificados como urbanizables y luego otro al sur y el último al este de la ciudad.

¿Qué planes tiene el ayuntamiento de Logroño sobre Monte Corvo?

La existencia de una zona verde y de reforestación para llevar a cabo sobre él un proyecto turístico dando prioridad a las bodegas junto a un enclave de alto valor arqueológico como es el Monte Cantabria. De esta manera quedaría rematada la ciudad por el norte. Por tanto, se pretende darle una perspectiva interesante desde el punto de vista económico y turístico con la construcción de un polígono agroalimentario con viñedos integrados en las bodegas.

¿Qué sucede en los tribunales entre ambas administraciones?

El ayuntamiento recurre todas las decisiones del Gobierno. Unas ya han sido resueltas dándole parcialmente la razón y, en otros casos no dándosela en nada. Nosotros hemos recurrido ahora la aprobación definitiva del proyecto urbanístico y si la sala del Tribunal Superior de Justicia de La Rioja defiende la tesis del Gobierno se llevaría a cabo la edificación de las viviendas en un terreno que ha ido comprando la empresa de Benítez, LMB, en los últimos años. Junto a él otra empresa, PROGEA, ha adquirido también terrenos, dándose el caso de que hace ocho años reconocía que era imposible llevar a cabo un proyecto como éste por motivos paisajísticos y medioambientales promoviendo su protección.

¿Cómo ha conseguido hacerse con la Comunidad con el Monto Corvo?

Haciendo valer la figura del interés supramunicipal en la Ley de Ordenación Territorial. En segundo lugar, se modificó la necesidad de que la Comunidad tenga que pedir licencia para llevar a cabo su proyecto. Y, por último, una modificación normativa que obligaba a que el ayuntamiento para resolver estas cuestiones tenía que acudir al Tribunal Constitucional y no podía resolverlo en los tribunales ordinarios. E incluso se han modificado las posibilidades de construcción de viviendas, es decir, modificaciones normativas para recalificar el terreno.