El primer encuentro de las 'Plazas de los indignados' trata de revitalizar el movimiento

La Asamblea de ayer por la tarde quedó en resolver esta noche, en otra asamblea, qué opción tomar de cara a las próximas fiestas de San Bernabé que comienzan el próximo 8 de junio en Logroño. La Plaza de Mercado es uno de los lugares referentes en la recreación medieval que desde hace cuatro años se vive en la capital para celebrar el aniversario del triunfo del Sitio de Logroño. Por ello, representantes del ayuntamiento se reunieron ayer con los 'indignados' y le ofrecieron varias opciones para garantizar la convivencia del campamento, el Mercado de Artesanía y las terrazas del verano de los establecimientos hosteleros.

La opción más viable es compartir la plaza y que el campamento de los 'indignados' forme parte de la propia recreación medieval adecuándolo a las características de la figuración de la empresa 'La Fragua de Vulcano' encargada de la representación de los actos de San Bernabé. La intención de los acampados es debatir cómo compartir la plaza, si en un espacio libre aparte o integrados en la estructura del mercado, siempre y cuando se mantenga la libertad de contenidos. La decisión que se tome esta noche en Asamblea tiene como límite garantizar que el Movimiento de 15M y el trabajo de los artesanos y expositores del mercado convivan sin perturbarse.

Este sábado, además, se ha organizado en Madrid el primer encuentro estatal de las Plazas del 15M y el movimiento en La Rioja contará con dos representantes que se trasladaran hasta la Puerta del Sol.

DENUNCIAS Y PRAGMATISMO

El Movimiento del 15M que surgió como un revulsivo social contra el conformismo ante una clase política incapaz de resolver los problemas de la gente, la crisis y el desencuentro social, se prolonga en el tiempo y en el espacio. Las plazas continúan ocupadas por campamentos improvisados a base de tiendas de campaña y diversos espacios dedicados a cuestiones tan diversas como bibliotecas o talleres.

En algunas ciudades, como Madrid, se ha convertido en una 'miniciudad' y ahora, más de 15 días después del comienzo, hay muchas dudas en el aire. ¿Hasta cuándo debe permanecer el campamento? ¿Ha tenido una consecuencia práctica en la vida de los ciudadanos este movimiento? Por una parte, existen los 'acampados' que plantean una retirada bien a los barrios o a otros lugares no tan céntricos de la ciudad y otros, prefieren permanecer en las plazas ocupadas.

Y además, un grupo feminista ha denunciado ante los medios de comunicación supuestos abusos sexuales y tratos vejatorios. Un asunto turbio que puede ensuciar la imagen de un movimiento espontáneo y social que ha sido noticia en todo el mundo.