El 'primer ministro' libio se reúne con Zapatero en Moncloa

La visita de Jibril a Madrid ha sido fructífera en tanto que la ministra Jiménez mantiene una estrecha colaboración y comunicación con los máximos representantes del poder alternativo surgido de la sublevación libia y que, a la postre, España considera ya la manifestación externa del pueblo libio. Tras el encuentro mantenido este jueves en el que se han pactado ayudas para sacar al país de la destrucción que ha implicado estos meses de una guerra que se mantiene abierta, se unirá el presidente Zapatero. Éste, ausente por la crisis del euro, recibe en Moncloa a Mahmud Jibril, 'primer ministro' rebelde.

Junto a él estará nuevamente la ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, y el coordinador de Presidencia y Relaciones Internacionales del PP, Jorge Moragas. Como ya declaraba este jueves la ministra Jiménez, esta visita supondrá “un paso más” en el respaldo político a la oposición libia, pero también en la ayuda que en el futuro España pueda prestar al que está llamado a ser el “embrión” de un Gobierno de transición que dirija Libia hacia una democracia.

La jefa de la diplomacia española ya reconoció, al igual que otra treintena de países que integran el Grupo Internacional de Contacto sobre Libia, al Consejo Nacional de Transición como la “autoridad gobernante legítima” en el país hasta que se ponga en marcha un Gobierno interino en el país. De hecho, España ha roto todo contacto con el régimen de Muamar Gadafi, a cuyo embajador en Madrid expulsó en junio.

En la reunión mantenida ayer con Jiménez, Jibril pidió ayuda económica para reconstruir el país y ofreció a empresas como Repsol YPF reanudar sus proyectos en suelo libio financiándolos con los fondos que Gadafi tiene congelados en España. El primer ministro del CNT consideró urgente que los miles de millones en los que están tasados los bienes inmobiliarios, las acciones y las cuentas bancarias de Gadafi puedan emplearse como aval para préstamos con los que atender las necesidades del pueblo libio después de cinco meses de conflicto armado.

El Ministerio de Economía y Hacienda lleva desde abril buscando fórmulas legales para que estos activos puedan transferirse sin incumplir el embargo de bienes impuesto por la ONU sobre Libia.