El Narcotest se estrena en Logroño con 45 positivos el pasado fin de semana

La Policía Local de Logroño puede detectar el consumo de marihuana, hachís, cannabis y cualquier otra sustancia estupefaciente entre los conductores gracias a una nueva prueba denominada “Narcotest”.

El concejal de Interior de Logroño, Miguel Sáinz, ha presentado hoy en una rueda de prensa esta prueba, que permitirá comprobar si un conductor se encuentra bajo los efectos de cualquier sustancia prohibida.

La prueba, que se guarda en un sobre precintado que abre el propio conductor, tiene un bastoncillo que permite tomar una muestra de saliva que después se inyecta en una cápsula, en la que aparece una línea blanca si se ha consumido alguna droga.

El “Narcotest” es “instantáneo, rápido y seguro”, además está validado internacionalmente y ya se utiliza en Alemania, Francia y Suiza y en otras ciudades de España.

Tras un resultado positivo, se realiza un análisis de sangre en un laboratorio para confirmar ese consumo de drogas, ha precisado Sáinz, aunque esta prueba tiene un 99,5 por ciento de fiabilidad.

El Ayuntamiento ha destinado 5.000 euros a la adquisición de cinco equipos y las boquillas necesarias para realizar estas pruebas, que pueden realizarse desde esta misma tarde.

Durante el pasado fin de semana, la Policía Local hizo 65 intervenciones preventivas en zonas de ocio para controlar la tenencia de estupefacientes y en 45 casos estas personas llevaban alguna sustancia para consumo interno, principalmente marihuana y hachís.

Sáinz ha asegurado que con este nuevo dispositivo mejorará la seguridad del tráfico en la ciudad, ya que evitará riesgos y accidentes, porque el objetivo del equipo de Gobierno es “no dar tregua al consumo de alcohol y drogas” en los conductores.

Por ello, ha anunciado que se incrementará el número de controles de alcohol y consumo de drogas.

En los meses de junio, julio y agosto, se han realizado el doble de alcoholemias en Logroño que el año pasado, con 1.200 pruebas, de las que resultaron positivas 364, un 30 por ciento del total, lo que supone un descenso del 10 por ciento respecto a 2010.

El conductor que haya consumido drogas será sancionado por cometer una infracción administrativa, con 500 euros de multa y la pérdida de seis puntos del permiso de conducir.

Sáinz ha incidido en que se desarrollarán acciones preventivas para evitar el consumo de alcohol y drogas, de modo que habrá actividades específicas en las campañas escolares de educación vial.

El concejal de Interior ha aprovechado la ocasión para felicitar a los policías locales, que asistían a un curso de formación para utilizar el “Narcotest”, por el trabajo que desarrollan durante los fines de semana.