Justo reparto de puntos entre U.D. Logroñés y Mirandés

UD Logroñés: Pablo (p), Ormazábal, Torres, Jano, Iñaki, Nacho, Sergio Rodríguez (Albístegui 84'), De Paula, Alejandro, Manu García (Quique 61') y Cervero (Osado 79').

C.D. Mirandés: Murcia (p), Iribas, César, Aitor, Raúl García, Garro, Iván Agustín, Mújika, Alain (Pablo 62'), J. Ángel (Muneta 55') y Lambarri (Martins 71').

GOLES: 0-0. Arbitros: Jose Antonio Salas Montero acompañado por Oscar Gómez y Edgar Nula del colegio catalán. Tarjetas: amarilla a Alejandro, Jano, Torres y a Manu García por parte de la U.D. Logroñés y a Ivan Agustin, Raul García, Iriba y Aitor por parte del Mirandés. Doble amarilla para Raul García (90+). Incidencias: alrededor de 3.500 espectadores en Las Gaunas y unos 800 aficionados venidos desde Miranda de Ebro.

U.D.LOGROÑÉS - MIRANDÉS, 0-0
Oficialmente el Mirandés lleva 720 minutos sin encajar un gol. Es además el único equipo invicto de su grupo y en cada partido deja claro por qué tiene estas estadísticas. En esta ocasión, pensando más en el partido de Copa del Rey del próximo miércoles que en el de liga merced al banquillo de lujo que se vio, el equipo que dirige Carlos Pouso se mostró más conservador que en otras ocasiones frente a una U.D. Logroñés irregular en su juego.

Para el conjunto riojano éste era un partido importante. Llegaba a Logroño el líder, el Mirandés, el único con cero goles en contra en su casillero. Y en un primer momento le plantó cara pero el equipo local fue de más a menos, todo lo contrario que el conjunto burgalés. 

Comenzó la primera parte con un intento de la U.D. Logroñés por mantener el control. Y las primeras aproximaciones fueron de los locales, la sensación de peligro empezaba teniendo color blanquirrojo.

El primer disparo del Mirandés se produjo a los 9 minutos de juego pero se perdió por la línea de fondo. Mientras los riojanos insistían una y otra vez por banda. Y la ocasión más clara llegó en un saque de esquina botado por Sergio. Pelota que le llega franca en el segundo palo a Alejandro pero el asturiano falla estrepitosamente. Corría el minuto 12. Y de nuevo Alejandro, tras una pérdida de balón de los burgaleses, tuvo el gol en sus botas pero Murcia evitó lo que ya se celebraba desde la grada.

El equipo riojano estaba mostrando un punto más de ambición que su rival que esperaba pacientemente su oportunidad para salir a la contra. Precisamente el entrenador logroñés, Nacho Martín, ya comentó antes del partido que estaba seguro que el Mirandés no iba salir a avasallar si no a esperar. Y así fue. Claramamente Pouso se reservó para el partido de Copa del Rey porque su banquillo estaba compuesto por los hombres que normalmente son titulares en liga.

Mientras sobre el campo el juego empezaba a ser algo aburrido. Destacar un disparo desde lejos de Aitor Blanco sin problemas para Pablo que apenas tuvo que intervenir en esta primera parte, todo lo contrario que Murcia. 

A medida que pasaban los minutos, el cuadro riojano se empezó a apagar, a abusar de los balones en largo sin orden en el centro del campo y el Mirandés comenzó a tocar más balón.

Pero las oportunidades más claras seguían llegando del lado local. Murcia se anticipó en su salida a Alejandro y Manu García lo intentó desde el pico del área grande pero le dio muy mal al balón. 

La volvieron a tener los de casa en una jugada trenzada dentro del área chica, demasiado trenzada, que acabó en nada despues de una gran acción individual de De Paula por su banda.

Transcurría el tiempo y el Mirandés, con una férrea defensa, empezaba a dominar el tiempo del partido. La primera parte terminó con empate a cero y con un equipo local, de nuevo, fallando ocasiones claras de gol y perdonando. No se vio mucho juego en estos primeros 45 minutos pero la U.D. Logroñés fue el equipo que pudo haber abierto la lata en varias ocasiones.

En el inicio de la segunda parte comenzó el Mirandés más animado, tomó las riendas y, haciéndose dueño y señor del centro del campo, dispuso de las mayores sensaciones de peligro. Además los cambios realizados por el equipo de Miranda de Ebro, con un banquillo de lujo, terminaron decantando la balanza del lado burgalés ante la falta de posesión de los de casa.

Pouso dio entrada a sus hombres titulares: Muneta, Pablo Infante y Martins saltaron al terreno de juego. Mientras por parte del equipo riojano, Alejandro seguía creando peligro; tuvo una buena ocasión para marcar pero su disparo se fue por encima del travesaño.

En las filas locales, Quique entró en el campo en sustitucion de Manu García en un claro intento de buscar velocidad por la banda izquierda. Osado y Albístegui también dispusieron de minutos.

Muneta dispuso de una ocasión bien clara tras un duro disparo que se le fue a la malla y Mujika mandaría el esférico alto en un buen remate de cabeza. Se estaba creciendo el Mirandés añadiendo una marcha más en su juego. Llegaba al área contraria con mucho peligro y los de Nacho Martín no sabían cómo pararles. Pablo terminó convirtiéndose en el salvador de la tarde con dos intervenciones cruciales.

Tras un rápido contragolpe, después de un peligroso balón perdido por Raul Torres en el medio del campo, Pablo se plantó solo ante Carmona pero éste, por bajo, le ganó la partida. Y de nuevo el portero blanquirrojo despejó magistralmente a corner un cabezazo de Mujika que todos cantaron como gol.

El Mirandés enseñó los dientes en los últimos quince mimutos, minutos de mayor bajón físico de los locales, y bien pudo haberle hecho un roto al cuadro local.

Por resaltar, una última ocasión para los riojanos. Osado botó, al filo de los 90 minutos, una falta que repelió en dos tiempos Murcia.

Por su parte el Mirandés se quedó con 10 a falta de tres minutos pero no hubo tiempo para mucho más. El partido terminó en tablas. Ambos conjuntos tuvieron claras ocasiones de gol pero los cambios del equipo de Miranda fueron esenciales en el devenir del partido.

Destacar por parte de la U.D. Logroñés las actuaciones de David De Paula, el mejor, mostrándose rápido y con desborde, y del portero Pablo Carmona, sustituto del titular lesionado Castilla, que evitó que su equipo se fuera con una derrota. Raul Torres, que vio tarjeta amarilla, se perderá, por acumulación, el próximo partido.

Ahora toca pensar en la Copa del Rey. Próxima cita, miércoles 12 de octubre, Anduva (18:00 horas).