Sin cobrar seis meses... y sumando

Mari Luz, una mujer que roza la cincuentena, ha acudido al Paseo del Espolón, para apoyar a su marido que lleva seis meses sin cobrar su sueldo. Es un trabajador de Indulacsa que ha dedicado a la empresa 24 años de su vida. Confiesa que la situación es insostenible: “Tengo a cuatro en casa, lo llevamos muy mal. Lo único que podemos hacer es ir a comer todos donde el jefe”, apunta con sentido del humor.

Es lo único que les queda a los 40 trabajadores de Indulacsa y a los otros 20 de Riojalex, ambas empresas pertenecientes al mismo grupo, que llevan sin cobrar las nóminas de septiembre, octubre, noviembre, diciembre, enero y la paga extra de Navidad. Todos esos meses sobreviven a base del apoyo familiar porque la empresa no se decide por llegar a un final y que sus trabajadores puedan cobrar al menos el subsidio por desempleo.

Alfredo lleva 12 años en Indulacsa. Agradece el apoyo a los compañeros porque sin este sustento moral es muy difícil ver como pasan los meses sin que a casa entre un céntimo. Además de sus nóminas, Alfredo asegura que han puesto incluso dinero de su bolsillo para ayudar a la empresa y “nos lo pagan así, dejándonos en la calle como a perros”. Este trabajador también recuerda que “llevamos todo un año advirtiéndole a la empresa que, si la cosa iba mal, que cerrara cuando nos debía menos, pero nos dijeron que no querían, y ahora estamos como estamos”.

Al menos, la dirección de Indulacsa ha presentado un concurso de acreedores para finalizar su actividad empresarial el pasado 26 de enero. Los trabajadores les toca esperar que la empresa presente un expediente de extinción de contrato, les finiquite y puedan acudir al paro.

Eso es lo que coreaban los sesenta trabajadores que se manifestaban hoy. Al grito de '¡queremos cobrar¡“ o ”¡que nos dejen cobrar del paro¡“, han portado pancartas frente al Palacio de Gobierno y han cortado parte del tráfico de la calle Vara de Rey.

Además, han repartido pasquines en los que informaban a “todos los ciudadanos de bien” que “sin han tenido relación o la van a tener son José Javier Lauzurica Valdemoros (profesor de la Universidad de La Rioja y máximo accionista de Indulacsa) y su hijo Javier Lauzurica Martínez (gerente de la empresa), sepan que estos señores a sus 40 empleados no les han abonado sus nóminas desde septiembre del 2011 y no por falta de trabajo sino por su mala gestión de administración ya que estaban facturando una media de 250.000 euros en tiempos de crisis”.