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230 civiles participan en una jura de bandera en Logroño

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El acto ha sido promovido por un grupo de “quintos” que realizaron el servicio militar en Logroño en 1960 en un regimiento de infantería acuartelado justo en el espacio que hoy ocupan el Ayuntamiento de Logroño y su plaza.

La jura de bandera ha estado presidida por el jefe del Mando de Apoyo Logístico del Ejército de Tierra, el general Luis Villanueva, y a ella han asistido el presidente del Gobierno riojano, Pedro Sanz, la alcaldesa de Logroño, Cuca Gamarra, y el presidente del Parlamento regional, José Ignacio Ceniceros.

También han estado presentes varios consejeros del Ejecutivo regional, el presidente del Consejo Regulador del Vino de Rioja, Víctor Pascual, alcaldes de otras localidades y el secretario general del PSOE riojano, César Luena, entre otros.

Fuera de la plaza, cientos de personas han seguido el acto de jura de bandera y posteriormente han presenciado un desfile militar con las dotaciones militares y de la Guardia Civil que han intervenido en la jura de bandera.

Las principales autoridades riojanas han sido las primeras en desfilar frente a la bandera y besarla, y tras ellos 230 personas, de entre 18 y 94 años, han realizado esta muestra de “reafirmación de su compromiso con España”, como la ha definido el Coronel Comandante Militar de La Rioja, José Luis García Garcés. La bandera ante la que se ha prestado juramento o promesa es la del regimiento de infantería ligera “Garellano número 45” ubicado en Vizcaya y Álava.

Para iniciar la jura de bandera, se ha conminado a todos los presentes a jurar o prometer “guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, con lealtad al Rey, y, si preciso fuera, entregar la vida en defensa de España”. Tras contestar, las autoridades y las 230 personas que habían solicitado jurar bandera, han desfilado ante ella.

Por último, se ha rendido un homenaje a los caídos, para lo que el presidente del Gobierno regional, Pedro Sanz, y el general Villanueva han depositado una corona de flores en un monolito instalado en la plaza para la ocasión.

El coronel García Garcés, como comandante militar de La Rioja, ha pronunciado un breve discurso en el que ha subrayado la “singularidad” de esta ceremonia con civiles, a pesar de que los ejércitos de todo el mundo la realizan desde hace siglos.

Con la jura de bandera, ha dicho, los militares refrendan su compromiso de defensa a la patria, algo que es “totalmente compatible” con “quienes sirven a la sociedad en otros ámbitos” que, llegado el caso, “pueden combatir codo con codo con su ejército”.

El delegado del Gobierno en La Rioja, Alberto Bretón, en declaraciones a los periodistas, ha subrayado el “simbolismo y cariño” de este acto.

Ha recalcado que “mas que nunca, España necesita dar un ejemplo de unidad” ya que “a lo largo de la historia hemos demostrado que en las situaciones de crisis y dificultad somos capaces de olvidar cuestiones territoriales y políticas para sumar”.

“Estamos en un momento de crisis donde más que nunca tiene sentido volver a recuperar esta fortaleza que da la unidad por encima de planteamientos políticos”, ha dicho Bretón, para quien este tipo de actos “da una imagen hacia al exterior de espíritu nacional, que es lo que tiene peso fuera para transmitir confianza y credibilidad como nación y país”.

A unos trescientos metros de este lugar ha tenido lugar una pequeña manifestación, convocada por diferentes colectivos y que se ha desarrollado sin ningún incidente, en la que se ha reclamado la supresión del Ejército y que el presupuesto de defensa se dedique a salud o educación

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