El Ayuntamiento incumple el contrato que obliga a sustituir los autobuses con más de doce años

El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Logroño, Domingo Dorado, recriminó al Gobierno municipal del PP que “durante este Legislatura no ha sustituido” los autobuses urbanos con más de doce años de antigüedad, “incumpliendo el contrato que obliga a ello”.

Dorado detalló que el Ejecutivo local “no ha renovado los nueve autobuses que incumplen el contrato de transporte urbano, que según el pliego de condiciones de la concesión de este servicio firmado en 1995 establece que deben sustituirse obligatoriamente los vehículos con más de doce años”.

Especificó que “incluso algunos de ellos superan en estos momentos los 14 años de matriculación”, al tiempo que recordó que “durante el mandato del Partido Popular al frente del Ayuntamiento de Logroño deberán renovarse 17 autobuses, nueve que ya circulan con doce años de antigüedad y otros seis que lo harán en los próximos meses”.

Dorado explicó que “la sustitución de los vehículos es complicada y larga de duración debido a la compra de los motores fuera de España y el montaje de la carrocería de cada uno de ellos, por lo que, difícilmente, el Gobierno local del PP renovará estos autobuses”.

Además apuntó que los autobuses urbanos “deben estar en buenas condiciones porque son piezas fundamentales en la movilidad sostenible y en el impulso del número de usuarios”. “Cuanto más viejos sean los vehículos, más contaminan, son más inseguros e incómodos para los pasajeros y sufren más averías”.

El portavoz socialista añaidó además que, durante la anterior Legislatura, el Gobierno del PSOE renovó en total catorce autobuses urbanos, ocho de ellos en 2008 y otros seis en 2011, “ya que superaban los doce años de matriculación”.

Por todo ello, Dorado denunció que “la mala gestión del PP con respecto al servicio de transporte urbano, con la falta de renovación de los autobuses y la subida del precio del billete, está repercutiendo en número de pasajeros que ha ido decayendo cada año”.

Igualmente reseñó que repercute “en la subvención que debe pagar el Ayuntamiento para cubrir el déficit de la empresa concesionario que se ha incrementado de 1,7 millones en 2011 a 3 millones este año, cantidad que no incluye la amortización de nuevos autobuses”.