La estación de autobuses necesita arreglos

La estación de autobuses necesita arreglos

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El concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Logroño Vicente Urquía ha reclamado este martes “arreglos” en la estación de autobuses, tanto en las viviendas y locales como en las propias instalaciones de la estación, y ha apostado porque se abra “un proceso participativo” sobre el futuro de esta dotación “para cuando desaparezca de ahí para instalarse en la intermodal”.

Urquía ha recordado que la actual estación, inaugurada en 1958, y que cuenta con un tráfico de 1,7 millones de viajeros al año, está en un estado “deplorable”, que ha señalado especialmente tanto en su fachada como en la zona de Avenida de España y en el zócalo, “sobre todo donde se encuentra la Asociación de Vecinos El Carmen”.

Ya en 2012, se comenzaron a enviar requerimientos a los vecinos para realizar los arreglos, sobre todo en Avenida de España y Pío XII, a los que han seguido otros, como en 2013, acerca del zócalo del edificio “que es lo que peor está”.

Ante esta situación, Urquía ha señalado que el Ayuntamiento es propietario del 45 por ciento de la manzana, tanto en viviendas como en locales, independientemente del solar de la estación en sí -andenes, vestíbulo y 500 metros cuadrados más adscritos a la concesión- por lo que le ha instado a “actuar”.

En este sentido, el edil socialista ha planteado cuatro propuestas, “al menos hasta que se vaya la estación de su actual ubicación”. En principio, la concesión se ha prolongado hasta el año 2016, “cuando se supone que ya estará en funcionamiento la intermodal”.

Por ello, ha pedido a la concesionaria que “de acuerdo con el pliego de condiciones, mantenga las instalaciones, no se puede tener el vestíbulo como está, que el Ayuntamiento requiera a esta empresa para que acometa al menos el saneamiento y pintura de dos columnas de la entrada, que no pueden seguir en ese estado”.

A ello ha sumado que, “contando con que el Consistorio tiene el 45 por ciento de la propiedad, y que el resto son propietarios minoritarios, y muchas veces con pocas posibilidades, que sea el propio Ayuntamiento quien impulse la reparación de los elementos comunes, y, si es necesario, que lo haga en ejecución subsidiaria”.

En tercer lugar, ha planteado que se incluyan “zonas homogéneas de actuación preferente” en las ayudas a la rehabilitación, “para que la recuperación de estos edificios, que son antiguos, que tienen unos 60 años, puedan recuperarse contando con estas subvenciones”.

Y, por último, Urquía ha advertido que “hay preocupación por edificios que se van a desocupar, como el Palacio de Justicia, pero no por la estación de autobuses, que es, además, un dinamizador de la zona con esos 1,7 millones de viajeros”.

“Hay dos años para definir qué hacer con esta zona, hay que tener una alternativa para cuando se vayan las instalaciones y no dejar la zona como un erial. Y no es necesario convocar un concurso de arquitectos importantes, sino un proceso participativo con profesionales del COAR y con los vecinos, para definir la dotación, actividad o actuación para el futuro de la estación de autobuses”, ha finalizado.

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