Mayor esfuerzo por incorporar a los jóvenes al sector agrario

El Gobierno de La Rioja ha autorizado la ampliación de la cuantía máxima de la convocatoria de ayudas destinada a facilitar la incorporación de jóvenes al sector agrario, que se dotará con 5,2 millones de euros en 2014. Un año más, se realiza un importante esfuerzo para atender el mayor número posible de solicitudes y dar respuesta al interés creciente por la actividad agrícola y ganadera, ha informado el portavoz del Ejecutivo regional, Emilio del Río.

Se trata de “seguir renovando el medio rural y poner las bases para el relevo generacional” que mejorará “la cohesión social y territorial”, ha señalado el portavoz gubernativo.

Del Río ha apuntado que la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente cree que esta medida de apoyo que se incluye en el Programa de Desarrollo Rural 2007-13, financiado con fondos europeos, ha sido una herramienta “muy útil para animar a los jóvenes a constituir una empresa agraria”. El año pasado ya se realizó una ampliación del presupuesto inicialmente aprobado, y se estableció un compromiso con las organizaciones agrarias para reforzar esta línea de ayudas que garantiza el relevo generacional en el campo riojano.

Durante este periodo de programación, un total de 301 jóvenes riojanos se han beneficiado de las ayudas concedidas por un importe de 14 millones de euros y, de este modo, se ha generado una inversión vinculada al sector primario de 20 millones de euros durante los últimos seis años.

BENEFICIARIOS

En cuanto a los requisitos que se exigen para ser beneficiarios de estas ayudas, los solicitantes deben tener entre 18 y 40 años en el momento de presentar la solicitud, e instalarse por primera vez como agricultor profesional, como titular, cotitular o socio de una explotación agraria prioritaria.

La ayuda media concedida por solicitante es de 46.703 euros. También tienen que comprometerse a ejercer la actividad agraria en la explotación en las mismas condiciones que motivaron la concesión de la ayuda y mantener las inversiones y la explotación objeto de ayuda durante cinco años contados a partir de la concesión.