La granja de La Grajera cierra hasta la próxima primavera

La granja de animales domésticos que el Ayuntamiento de Logroño habilitó este año en el parque de La Grajera cierra sus puertas tras finalizar su primera temporada, que se ha extendido de marzo a octubre.

Esta granja, ubicada en el camino del campo de golf, ha sido visitada durante estos meses por miles de logroñeses que han podido ver de cerca a alrededor de cuarenta animales domésticos, entre ovejas, cabras, conejos, cerdos, gallinas y burros.

Durante este tiempo, ha tenido una gran aceptación por parte de los logroñeses y ha dado numerosas anécdotas que han podido vivir sus visitantes: desde las iniciales dificultades de convivencia entre las diferentes especies y su adaptación al nuevo medio hasta el nacimiento de animales, como la burrita Luna, hija de Espartera y de Tarzán, cuyo nombre fue elegido por los logroñeses a través de las redes sociales. En unos casos se van más ejemplares de los que llegaron (burros, ovejas y cabras) y en otros regresan muy cambiados por su extraordinario crecimiento (como es el caso de los cerdos).

Con esta iniciativa, el parque de La Grajera dispone desde este año de un nuevo atractivo que permite disfrutar aún más de este espacio natural que se distribuye en torno al pantano de La Grajera, el mayor 'pulmón verde' de la ciudad.

La granja se ha convertido en un importante reclamo para personas de todas las edades que han tenido la oportunidad de ver estos animales autóctonos en un ambiente natural. Sin duda, han sido los niños quienes más han podido disfrutar de este nuevo recurso ya que, al crecer en ambientes urbanos, se ven privados de conocer estos animales en su medio habitual.

Aunque es difícil realizar una estimación de visitas, al tratarse de un espacio abierto, se estima que de media han visitado la granja algo más de un centenar de personas, de lunes a viernes, duplicándose los fines de semana e incluso superando notablemente estas cifras. A esto hay que añadir la visita de diez colegios. Por tanto, la cifra de los logroñeses que han visitado y conocido la granja durante esta primera temporada superaría las 20.000 personas.

Una vez finalizada la temporada, los propietarios de los animales vuelven a llevárselos a sus granjas, ya que los animales son cedidos. El Ayuntamiento de Logroño quiere agradecer a los propietarios de los animales su colaboración desinteresada con este proyecto de educación medioambiental que ha arraigado en los corazones de los logroñeses y el trabajo de los funcionarios municipales que se encargan del cuidado del Parque de la Grajera.

Dada la buena experiencia que ha supuesto esta iniciativa, el Ayuntamiento tiene previsto iniciar la próxima primavera una nueva temporada.